SANTIAGO.-
"Estamos frente a un agresor sexual". Así, a través del primer perfil psicológico del presunto secuestrador de la pequeña Emmelyn Canales (11),
José Manuel Navarro (31), la PDI dio cuenta, de forma preliminar, del estado mental del imputado.
En ese sentido, el psicólogo criminalístico del instituto de Criminología de la PDI, comisario
Francisco Cevallos, añadió que "por el momento lo que tenemos es un sujeto que se encuentra plenamente consciente de los actos cometidos", por lo que,
"es capaz de responder por los actos que ha realizado durante estos días".
"Lo que podemos señalar es que hay un sujeto que responde a las características psicológicas y relacionales que le permiten relacionar dinámicas para hacerse con víctimas mayormente conocidas. Dinámicas que son utilizadas por un agresor sexual y que facilitan la manipulación de su entorno familiar y la manipulación de la dinámica relacional de los familiares de la víctima", agregó.
En consecuencia, continuó Cevallos, Navarro "se gana la confianza de sus víctimas", y desde ahí "resignifica aquellos actos de connotación sexual".
"Se trata de un sujeto que tiene antecedentes previos por abuso sexual, donde las víctimas fueron las hermanas de éste, y desde ahí que él se mueva en este escenario", recalcó.
Asimismo, sostuvo que las prácticas de "hechizaría" en las que se ha vinculado al imputado "en realidad son dinámicas para poder manipular a las familias de las víctimas y poder acercarse a una víctima (que en el caso de Emmelyn) presentaba las características que busca cualquier agresor infantil".
"Esto es, vulnerabilidad de la víctima, una víctima más bien indefensa, con escasa relación interpersonal y también con factores familiares interpersonales que facilitan de cierta manera que el agresor lleva a cabo actos abusivos contra estas víctimas", indicó el policía.
Por otro lado, Cevallos manifestó que en Navarro "se han encontrado rasgos que responden a una personalidad psicopática, es prematuro poder señalar que estamos frente a alguien que responde a este diagnóstico". Si embargo, aseguró, "se registra falta de arrepentimiento y escasa capacidad de empatía" en el sujeto.
"El diagnóstico de psicopatía es un diagnóstico clínico, psiquiátrico y, por lo tanto, requiere una evaluación en profundidad. Lo que tenemos ahora es una apreciación clínica que nos permite referirnos en ciertos aspectos a su funcionamiento", aclaró.
En consecuencia, "lo que podemos aseverar, es que se trata de un sujeto que tiene sus facultades mentales conservadas, que realiza actos bajo su propia voluntad y que despliega conductas de manipulación con su entorno", explicó Cevallos.
Finalmente, el funcionario de la PDI advirtió que los agresores sexuales "están más cerca de lo que la sociedad cree (...) La verdad nos golpea con escenarios e historias como ésta. Pero tenemos agresores sexuales que están instalados en el circulo familiar". Lo que, afirmó, se presenta en el 70% de los casos de abusos sexuales infantiles.
La madrugada de ese sábado, Emmelyn Canales, desaparecida hace ocho días en la comuna de Licantén -Región del Maule-, fue hallada con vida y en buen estado de salud, sin signos, hasta ahora, de una agresión sexual.