Isaac Givovich llegó acompañado de su esposa, Asunción Lavín, y de Jaime Concha, Gonzalo Dezerega y Jorge Franco, otras víctimas de abuso.
Agencia Uno
SANTIAGO.- Tras dos horas y media de reunión, Isaac Givovich y otras tres víctimas de abuso sexual por parte de hermanos maristas salieron de la Nunciatura Apostólica y se refirieron a lo conversado con el enviado del Papa Francisco, monseñor Charles Scicluna.
Isaac Givovich, que llegó en compañía de su esposa Asunción Lavín (hija del alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín, aseguró que "hemos salido con una grata impresión, en donde hemos sido escuchados por parte del obispo de Malta, nos llevamos un compromiso de él, que es lo que más nos importa, y es que él va a transmitir a la Santa Sede que los hermanos maristas no puedan ser juez y parte en el proceso y van a buscar una solución a esto".
En ese sentido, el empresario se refirió a la investigación que lleva a cabo el sacerdote salesiano David Albornoz, designado por la Congregación Marista para recabar antecedentes en las denuncias de al menos 18 ex alumnos del Instituto Alonso de Ercilla y del Colegio Marcelino Champagnant, que acusan a 10 religiosos de abusos desde la década de los 70.
Givovich, ex alumno del Instituto Alonso de Ercilla y supuestamente abusado por el hermano Adolfo Fuentes, contó que Scicluna "ha escuchado con mucha caridad a cada uno de nosotros en nuestros testimonios. Han habido momentos muy difíciles adentro, no es fácil volver a contar lo que hemos vivido, lo que hemos sufrido y por lo que vamos a seguir luchando".
"Estamos agradecidos hoy, quienes somos católicos, del gesto que ha hecho la Iglesia y el Vaticano, creemos que este es un paso más para la justicia, porque la verdad ya está, eso es algo irrefutable, y ahora lo que nos queda es esperar que haya justicia y reparación para que haya reconciliación", puntualizó.
"Un día histórico"
A cita, Givovich llegó junto a otras tres víctimas de abusos en el Alonso de Ercilla: Jaime Concha, Gonzalo Dezerega y Jorge Franco.
Por su parte, Concha sostuvo que "para nosotros hoy día es un día histórico, porque por fin se ha roto en este lugar y en nuestro país el círculo de hierro que se había establecido para la impunidad".
"Nunca más las víctimas de abuso sexual eclesiástico no van a ser escuchadas. Van a ser escuchadas, se van a abrir las puertas y tenemos el compromiso para que la verdad llegue donde haya que llegar, para que nunca más los informes y los testimonios, sean censurados, recortados, las víctimas seamos ninguneadas", agregó.
El médico afirmó que "se abren nuevos caminos de justicia y de verdad y yo me voy feliz, tranquilo y satisfecho porque nuestra lucha está dando frutos de verdad y justicia".
Respecto al compromiso de Scicluna de sacar a la Congregación Marista de la investigación canónica, Concha comentó que el arzobispo de Malta "va a hacer una recomendación y obviamente quien toma la decisión es Francisco. Así que tenemos la tranquilidad de que ahora los antecedentes van a estar con Francisco y el Vaticano y ellos decidirán si siguen encubriendo o hacen justicia. Confiamos en que la justicia va a llegar por fin".
En tanto, Dezerega coincidió en que se trata de "un día histórico". Señaló que "encontramos en monseñor Scicluna un respaldo, que nos escuchó muy bien nuestro testimonio y esperamos que en la Santa Sede se tome una resolución favorable, que los jueces sean de la Santa Sede y no los mismos maristas que son jueces y parte, por la transparencia de todo".
Finalmente, Franco comentó que "creo que lo hemos hecho hoy día, los sobrevivientes de los maristas, de los abusos en el Instituto Alonso de Ercilla, hemos venido a darle una mano al Papa. Creo que la Iglesia debe dejar de hacerse la ciega, sorda y muda. Nuestro testimonio es bastante claro, por lo tanto esperamos y confiamos en que las personas que nos recibieron hoy día puedan transmitir esto al Papa Francisco".
