SANTIAGO.- "La cláusula es una garantía lógica y legal, que busca que la compradora (Progreso) no pueda vender las acciones de la empresa Araucaria, que fueron el objeto del contado, antes de que se realice el pago del total precio al partido".
Así, el abogado
Ramón Sepúlveda -quien representa al presidente del Partido Comunista,
Guillermo Teillier, en la causa en que se investiga la millonaria venta de la Sociedad Inmobiliaria e Inversiones Araucaria SpA, vinculada con el PC, a Inversiones Progreso SpA- salió a responder a los cuestionamientos que surgieron luego de que en su declaración judicial en calidad de imputado el diputado reconociera que en la transacción comercial (efectuada en octubre de 2016) se fijó una condición a Progreso que supedita al consentimiento del PC la venta de acciones de Araucaria.
"Decidimos establecer una cláusula que impidiera la venta futura de las acciones de la empresa, sin el consentimiento del partido, pero no así de enajenar los inmuebles propiamente tales", dijo Teillier a la fiscalía el pasado 8 de febrero.
Durante la diligencia, indicó además que la decisión fue visada también por los abogados del partido, Boris Navia y Eduardo Contreras. Ambos fueron citados a declarar en la causa.
El líder de la colectividad declaró en calidad de imputado ante el fiscal de Alta Complejidad Centro Norte, Marcelo Carrasco, donde reconoció que se fijó cláusula que supedita al consentimiento del PC la venta de acciones de la empresa dueña de inmuebles que eran del partido.
