Felipe Vargas, El Mercurio.
SANTIAGO.- "Para quienes dejamos el poder, en tanto,
viene un tiempo de reflexión y autocrítica, tanto respecto de nuestro pasado más próximo como del futuro", son las palabras del ex intendente de Santiago,
Claudio Orrego, tras dejar el cargo para dar paso a
Karla Rubilar.
Pero, en una columna en el
"El Mercurio", Orrego insta a que en esa discusión también "se definirá
el futuro de la centroizquierda".
"Quizás uno de los principales errores cometidos por la centroizquierda chilena, incluidos algunos en la DC, fue el abandonar los principios que hicieron grande a la Concertación, la coalición política más exitosa de la historia de Chile", aseguró el ex Intendente.
El abogado añadió que "lo único positivo de la aplastante derrota de Piñera a Guillier en 2017 es que el recurso barato de buscar respuestas fáciles o chivos expiatorios no funcionará".
Orrego sostiene que hasta el momento no existe una autocrítica desde la Nueva Mayoría por la derrota en las elecciones presidenciales y también pronosticó que si eso no cambiaba durante los meses que vienen, "y el nuevo gobierno hace bien su trabajo, nadie puede descartar un gobierno de derecha proyectado más allá de este período presidencial".
Sobre el desafío que se viene para su partido, la Democracia Cristiana, apuntó a que sin un nuevo pacto de gobernabilidad "puede entrar en un proceso irreversible de decadencia. Este pacto debe incluir una agenda proconvivencia y respeto interno, una descarnada autocrítica de nuestro desempeño como partido y gobierno, una propuesta de futuro y un compromiso de protección de nuestros liderazgos".
"La reflexión y la autocrítica de los próximos meses serán claves para ver si existirá una alternativa de centroizquierda exitosa para las próximas elecciones de 2020. La historia nos enseña que la debilidad de las coaliciones de centro es la que permite
el surgimiento de los populismos que tanto mal le han causado a nuestro continente", afirmó Orrego.