El fiscal de Aysén, Carlos Palma, es quien lleva la causa.
Mario Quilodrán, El Mercurio
SANTIAGO.- Ante la Fiscalía Regional de La Araucanía peritos de Labocar, identificados como los suboficiales Marvin Marín y Manuel Riquleme, entregaron detalles de la manera en que habría operado la policía uniformada en la recolección de evidencias en tres casos que actualmente se indagan: los atentados incendiarios en la región, los ataques a 29 camiones en San José de la Mariquina y también la pérdida de armas desde una comisaria en Iquique.
"Quisiera señalar que en el caso Huracán, la evidencia fue manipulada y alterada por los miembros de la UIOE, específicamente, por el capitán (Leonardo) Osses, por el 'profesor' (Álex) Smith, bajo las instrucciones del mayor Patricio Marín. Esto está claro porque ellos tenían acceso a la evidencia, lo hicieron en horarios en que no estábamos y también cuando recién fueron incautadas las evidencias, antes de que empezáramos a trabajar", dijo el suboficial Marín.
La diligencia se trata de una ampliación de sus declaraciones judiciales que prestaron a inicios de marzo ante el fiscal Carlos Palma, quien investiga la posible existencia de una "máquina para implantar pruebas" que habría operado al interior de la Inteligencia de Carabineros.
"Smith me reconoció que Osses, Marín y (el mayor Héctor) Olave alteraron las pruebas, que implantaron las conversaciones en los teléfonos de 'Huracán'. Que incluso Olave se había equivocado en la implantación de un teléfono, pues, puso la conversación de (Héctor) Llaitul con su hijo (Ernesto), en un teléfono que no era de ninguno de los dos. Respecto de esto, Smith me dijo abiertamente que ese error lo había cometido Olave", añadió.
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