SANTIAGO.- Tras el "colapso histórico" que se produjo ayer domingo en los accesos a la Región Metropolitana -especialmente en la Ruta 68- por el retorno de vehículos luego del fin de semana largo, el
ministro de Obras Públicas, Juan Andrés Fontaine, reveló las medidas de corto, mediano y largo plazo que aplicarán para mitigar este problema.
Junto con ello, hizo una autocrítica a la gestión del Gobierno: "Los planes (de contingencia) que se establecieron la semana pasada y ante pasada efectivamente se aplicaron de acuerdo a lo que estaba previsto. En realidad lo que no se previó fue la concentración de vehículos en una determinada hora durante la tarde de ayer en la Ruta 68".
En concreto, "lo que he instruido es que se
constituya una mesa de trabajo por parte de las concesionarias, Ministerio de Transportes, de Obras Públicas y Carabineros para efectos de revisar la operación de las medidas de contingencia adoptadas para este fin de semana y proponer cambios en esas medidas a efectos de que no se repitan algo como lo que vimos", dijo el secretario de Estado respecto a las iniciativas más urgentes.
Según indicó, la dirección de estas medidas sería tener sistemas uniformes en las distintas rutas; mejor coordinación con Carabineros; e incentivos económicos, como por ejemplo, peajes a $1.000. El equipo técnico estudiará si ese monto es suficiente incentivo para atraer más tráfico a esas horas de menos congestión.
"Esperamos que los resultados (de la mesa de trabajo) estén en operación en el próximo fin de semana largo que corresponde al del 21 de mayo", aseveró.
En tanto, las medidas de mediano plazo apuntan a "establecer un sistema de flujo libre con telepeajes en las rutas alrededor de Santiago de manera que no hayan más tacos en los peajes".
Para esos efectos, el ministro pidió a las concesionarias que en 30 días en conjunto con la cartera produzcan un plan de "acción inmediata para tener en operación en cuanto antes los sistemas de telepeaje, sin barreras y flujo libre".
Por último, anunció la ampliación de terceras vías en las carreteras ubicadas alrededor de Santiago (Ruta 68, 78 y 5 Sur) "
porque el problema más de fondo es que ha habido poca inversión en el pasado (...) la baja en la inversión crea falta de capacidad, y esa falta de capacidad es la que se percibió de manera extrema".
"En el caso de la 68 entre Vespucio y el Túnel Lo Prado habrá una tercera vía. En el de la 78 entre Talagante y Melipilla. En la Ruta 5 Sur entre Angostura y Rancagua, además de otros cambios que van a mejorar el estándar de operación", explicó Fontaine.
"Estos son convenios que se tienen que suscribir con las concesionarias, modificando contratos que vienen de muchos años atrás, que hay que ajustar los que están en negociación. En el caso de uno de ellos ya está negociado y está pronto a iniciarse las obras correspondiente", agregó.
"Abrir las barreras"
Muchos automovilistas reclamaban que las autopistas debían abrir las barreras de los peajes manuales para que los vehículos no se atocharan y así hacer el tránsito más expedito.
Sobre esto, el titular de Obras Públicas manifestó que "entiendo esa molestia, pero lo que hay que tener conciencia es que aquí tenemos contratos firmados durante varios gobiernos anteriores que son los que rigen la operación de estas autopistas y esos contratos no contemplan el levante de barreras".
"Lo que sí contemplan es la obligación de las concesionarias de hacer las inversiones necesarias para que este problema no se produzca y eso es lo que nosotros vamos a hacer efectivo en estos 30 días: lograr con las concesionarias un plan de instalación rápida del mecanismo de que no existan barreras", aclaró el ministro.