SANTIAGO.- La mañana del 23 de enero el entonces Presidente electo, Sebastián Piñera, anunciaba quiénes conformarían su gabinete ministerial a partir del 11 de marzo.
Del equipo que lo acompañaría, uno de los que más llamaba la atención era Gerardo Varela, abogado experto en derecho corporativo, parte de la Fundación Para el Progreso y presidente del directorio de Soprole, quien estaría a cargo del Mineduc, uno de los ministerios más polémicos y por el que han pasado siete titulares en los últimos ocho años.
Lo poco que se conocía de él en su faceta pública era como columnista de El Mercurio y El Líbero, espacios en que se había mostrado contrario a la gratuidad y en el que había disparado polémicas frases como "la educación, como la salud y la seguridad, son tanto derechos como bienes económicos".
Esto despertó rápidamente las críticas de la oposición y de la Confech, que cuestionaron su visión de la educación y su falta de experiencia en la materia.
Y es que su tarea no era fácil. El recién nombrado ministro de Educación sería el encargado de implementar la Ley de Inclusión, la Ley de Nueva Educación Pública y la Ley de Educación Superior.
Asimismo, deberá encargarse del cierre definitivo y reubicación de los estudiantes de la Universidad del Mar, de la Arcis y de la Iberoamericana.
Pese a ello, en sus primeros días de mandato el abogado aseguró que el foco estará puesto "en los niños más chicos porque ahí es donde se planta la semilla de la educación" y en la línea técnico profesional.
Primeros lineamientos y fallo del TC
En estos 31 días a cargo del ministerio, Varela ha intentado imponer el mensaje de que no eliminará los avances del último tiempo pero sí realizará las modificaciones que estime pertinentes, como es el caso de la selección en los colegios o la implementación de la nueva Ley de Educación Superior.
"La haremos sin sesgos ni prejuicios, pero tampoco con complejos (...). Estaremos dispuestos a modificar, sustituir o complementar lo que sea necesario", aseguró hace unos días el titular de la cartera.
Sin embargo, en cuanto al proyecto que reemplazaría al Crédito con Aval del Estado (CAE) y que fue presentado por la administración de Bachelet días antes de dejar la presidencia, Varela sorprendió la semana pasada al retirar la iniciativa y confirmar que presentaría una nueva dentro de los próximos 90 días, adelantando que esta sí excluiría a la banca privada y sería similar al Fondo Solidario.
Pero el camino se le puso cuesta arriba cuando el Tribunal Constitucional recogió el "téngase presente" que presentó Pilar Armanet, ex rectora de la Universidad de las Américas en representación del Consorcio de Universidades Privadas, y declaró inconstitucional al artículo 63, relativo al lucro, de la reforma educacional.
Esta medida sin duda encendió las críticas de distintos sectores. No obstante, el abogado intentó bajarle el perfil al señalar que el lucro "está prohibido por ley" y que es un tema que "quedó zanjado y superado".
Frases más polémicas y próxima marcha
Por otro lado, una de las frases que más polémica generó fue a solo una semana de asumir cuando señaló que "el tiempo de las marchas ya pasó" y que el movimiento estudiantil va a perder fuerza ya que se va a dar cuenta que "su verdadero deber no está en la calle, sino que en la sala de clases".
Sus declaraciones no solo recibieron el rechazo de la Confech, sino que también del Colegio de Profesores, quienes argumentaron que "marchar es un derecho constitucional".
Hasta la fecha solo el Colegio de Profesores se ha reunido con el ministro, no así la Confech o la Cones. Estas tres agrupaciones ya programaron una marcha para el próximo 19 de abril y extendieron la convocatoria a todas las universidades del país debido a las fuertes diferencias que los separan del gobierno actual, aseguraron.