Los dichos del ministro Varela fueron criticados tanto en la oposición como en el oficialismo.
César Silva, La Segunda
SANTIAGO.- "A veces las palabras sobran.
Lo público tiene códigos que no dan lugar a ninguna expresión que no se enmarque en la rigurosidad del contenido formal. En lo ritual. Esta semana, este ha sido un aprendizaje adquirido a un alto costo".
Así comienza la carta en la que el ministro de Educación,
Gerardo Varela, pide perdón por la situación que en los últimos días lo ha tenido el centro de la polémica, luego de que en una entrevista se refiriera a cómo enfrenta la educación sexual de sus hijos.
En esa instancia, el secretario de Estado dijo que se consideraba "bastante liberal" en esa materia y añadió que, incluso, les compra condones a sus hijos. "Son unos campeones, necesitan más de tres parece", expresó Varela, frase que desató la controversia.
A raíz de esta situación, este domingo el titular de Educación publicó en el diario El Mercurio una carta titulada
"Una explicación necesaria", en la que se disculpa por sus palabras.
"Me doy cuenta de que me equivoqué y, en el mundo de la política, no es frecuente que un actor importante reconozca un error"
Gerardo Varela, ministro de Educación
"Vengo del mundo del ejercicio profesional del Derecho. Es normal que luego de las audiencias en que los abogados enfrentan con pasión sus respectivas posiciones, terminen tomándose un café, compartiendo anécdotas.
No ocurre lo mismo en la actividad pública. El ancho de banda no admite ningún error como el que cometí esta semana", declara Varela.
En el texto, el ministro califica sus dichos como "una mala broma" y lamenta las consecuencias de esto: "Lo peor de este incidente, del que me hago responsable con la integridad que corresponde, es que lo que queda no es el fondo, sino la caricatura".
"En Chile están ocurriendo cosas demasiado importantes que nos obligan a todos a buscar un clima de mayor distensión, partiendo por las autoridades. Por eso escribo estas líneas, porque me doy cuenta de que me equivoqué y, en el mundo de la política, no es frecuente que un actor importante reconozca un error", agrega el abogado.
"La ética enseña que cuando se tiene conciencia de un error, lo mejor es corregirlo lo más luego posible", concluye Varela.
