Tiene graves acusaciones en su contra.
El Mercurio
SANTIAGO.-
Castings en su departamento y de noche con actrices jóvenes, abuso de poder y acoso sexual. Esas son algunas de las graves acusaciones que hacen siete mujeres a la revista "El Sábado" sobre lo que tuvieron que vivir con Herval Abreu (54), uno de los directores televisivos más importantes de Chile.
Este personaje, quien dirigió célebres teleseries como "Machos" y "Soltera otra vez", niega todo de lo que se le acusa. Sin embargo, Javier Urrutia, director ejecutivo de Canal 13, estación donde trabajaba Abreu, confirma que a la contraloría del canal llegó una denuncia por acoso de parte de la guionista Bárbara Zemelman.
En el suplemento de "El Mercurio", Zemelman narró una de las tantas cosas que vivió. Un martes de octubre de 2016, durante la primera etapa de la escritura de la teleserie "Preciosas", ella recibió un mensaje de WhatsApp de Abreu cerca de las 16.00 horas.
"Y me llega este mensaje que decía 'quiero hacerte el amor ahora'. Me quedo estupefacta y luego me pone 'ja, ja, ja'. Yo estaba en mi casa y lo encaré. Me dijo 'yo estoy enamorado de tu cerebro', 'me pareces tan inteligente', y les comenté a mis colegas lo que había pasado. Dijo que estaba enamorado de mi cerebro y que era 'un decir'. Le dije que no me parecía, pero él le bajó el perfil. Nunca dijo que fuera un error", relata Zemelman.
Otra mujer que lo acusa es Carola Paz, ex diseñadora y arquitecta que durante 21 años no dijo nada sobre lo que le hizo Abreu.
Un día, "él me levantó el vestido. Metió la mano por debajo de mi vestido. Yo creo que el estaba intentando ver, dentro de toda su locura, si yo estaba excitada. Cuando me tocó me sentí congelada, porque no sabía qué hacer. No le quité la mano. Me debo haber acomodado para alejarme de su mano, pero no lo golpeé ni le dije nada. Me quedé muda y no le dije nada el resto de la noche. Sentía que iba en un túnel que cada vez estaba más oscuro. Hasta hoy me da asco acordarme", cuenta Paz.
Lea más detalles de ésta y otras acusaciones en
El Mercurio, donde el director hace sus descargos y niega todo.
