SANTIAGO.- "Vamos a legislar para aumentar los plazos de prescripción, para que los delitos sexuales contra nuestros niños no queden impunes".
Ese fue el anuncio que hizo el pasado martes el Presidente Sebastián Piñera luego de referirse a la muerte de la menor Ámbar. La idea ya había sido anticipada por el ministro Secretario General de la Presidencia, Gonzalo Blumel, quien hace algunas semanas sostuvo que "nosotros (Gobierno) estamos estudiando una reforma para ampliar los plazos de prescripción o plantear lo que se llama imprescriptibilidad".
Finalmente, según aclaró ayer el ministro de Justicia, Hernán Larraín, el Gobierno ingresará una indicación a la iniciativa que ya está en el Senado desde 2010, y a la que la ex Presidenta Michelle Bachelet puso suma urgencia en marzo del presente año, a solo días de dejar su cargo.
Esta indicación del Ejecutivo no plantea la imprescriptibilidad, sino que propone aumentar los plazos para que los delitos de dicha índole prescriban a los 30 años.
Hoy el Presidente presentará esta indicación a las 10.30 y se espera que se esta tarde reciba en audiencia a la Defensora de la Niñez, Patricia Muñoz.
Ámbar y las víctimas de Karadima
Dicho proyecto surge justo cuando el debate por la impresciptibilidad en crímenes de pedofilia se encuentra en medio de la agenda pública. Incluso, horas antes de que el jefe de Estado hiciera su anuncio, fue emplazado, desde Roma, por las víctimas del párroco de El Bosque Fernando Karadima, quienes detallaron a la prensa las reuniones que sostuvieron con el Papa Francisco durante los últimos días.
"Le pido aquí, públicamente, al Presidente de mi país, que como lo está haciendo, tome la decisión más sabia y a favor de las víctimas, que hoy en día lo necesitan para la paz social y en su corazón, para la ley de imprescriptibilidad para abusos sexuales de menores y adolescentes", señaló James Hamilton.
Lo anterior, impulsado además por las exigencias de la ciudadanía gatilladas por el reciente caso de la pequeña Ámbar. Menor de un año y ocho meses que fue brutalmente golpeada y violada hasta la muerte el sábado por, presuntamente, la pareja de su tía, identificado como Andrés Espinoza (30).
Antes de visar el proyecto, Blumel precisó que fue estudiado en conjunto por quienes "lideran estos temas", como el propio Hamilton, o la ex atleta y ahora diputada, Erika Olivera, quien el 2016 declaró haber sido abusada durante su niñez por su padrastro..
Proyectos que vienen desde hace años
En consecuencia, la parlamentaria agradeció "el apoyo que está prestando el Gobierno en ese sentido, de levantar el tema que es tan importante, que, por cierto, hay proyectos que vienen desde hace años. Hoy día lo que se hace es tomar estos proyectos, estudiarlos y desde ahí, mañana (hoy) se firma".
Y es que esto está lejos de ser una idea nueva. La primera iniciativa de este tipo se remonta al año 2005, cuando el entonces diputado Patricio Walker (DC) presentó un proyecto que proponía eliminar el plazo de prescripción de los delitos sexuales cometidos contra menores de edad. Lo que, finalmente, quedó sin efecto.
Cinco años después hubo un segundo intento. Nuevamente Walker, ahora desde el senado, acompañado por Jaime Quintana (PPD), Fulvio Rossi (PS) y Ximena Rincón (DC) lograron que la reforma volviera a ser discutida, pero descartada el año 2014.
Tuvieron que pasar dos años para que el pleno del Senado respaldara la intención unánime de la comisión especial encargada de tramitar proyectos de ley relacionados con niños, niñas y adolescentes, y desarchivar la idea desechada el 2014, siendo el 2017 nuevamente congelada.
Desde este jueves, la reforma que pretende alterar los estatutos de los crímenes por abusos sexuales infantiles, tendrá una nueva oportunidad en el Congreso, pero esta vez, sin la misión de encontrar la imprescriptibilidad, sino que alargar los plazos para impedir que ésta termine cerrando los casos.
"Hoy lo que dice la ley es que cumpliendo los 18 años, recién ahí tienes 10 años para denunciar estos casos. Hoy (con el cambio en la norma) la posibilidad que se les da a las víctimas, según lo que entiendo, es que una vez que se sienta preparada, independiente de la edad que ella tenga, desde ahí va a correr el tiempo y eso puede llegar a 30 años", explicó Olivera.