Danitza Gutiérrez se recupera "de forma extremadamente satisfactoria", dijeron los médicos.
Clínica Las Condes
SANTIAGO.- Una paciente de siete años es la primera menor de 10 en recibir un trasplante bipulmonar de un donante adulto, logrando "un hito en la trasplantología pulmonar" de Chile.
En concreto, dado que la menor padecía una fibrosis quística avanzada y estaba en lista de espera desde agosto del año pasado, se le hizo una reducción de órganos a un paciente adulto para injertarlo en un paciente pediátrico, explicó Pedro Felipe Undurraga, jefe de trasplante pulmonar de Clínica Las Condes.
"Con esto estamos disminuyendo la alta mortalidad que tienen las listas de espera pediátrica de trasplante a nivel nacional", subrayó el profesional, haciendo énfasis en la importancia del trabajo conjunto entre lo público y lo privado, en este caso, con el Hospital San Borja Arriarán.
Además, aseguró que la pequeña oriunda de Puerto Montt "se está recuperando de forma extremadamente satisfactoria", pero que se mantiene "en un condición de alto riesgo".
"Frente a la baja cantidad de donantes a nivel nacional esta es una técnica que abre las puertas a tener más donantes para pacientes pediátricos, y eso es bastante trascendente".
Pedro Felipe Undurraga, jefe de trasplante pulmonar CLC
Con esta cirugía, realizada el miércoles 2 de mayo, "se está disminuyendo la alta mortalidad que tienen las listas de espera pediátrica de trasplante a nivel nacional", aseveró el profesional, añadiendo que la intervención fue de "alta complejidad" y "duró aproximadamente 10 horas".
Por su parte, María Lina Boza, encargada del Programa de Fibrosis Quística del Hospital San Borja Arriarán, advirtió de la importante que tienen lo donantes: "las familias de repente no piensan en cuánto se beneficia un paciente que finalmente fallece, con el mucho dolor de la familia, pero que es capaz de salvarle la vida a cuatro o cinco personas".
Respecto a la enfermedad, detalló que si ésta "se maneja bien desde un comienzo cuando el niño nace, si se diagnostica muy chiquitito lo más probable es que puedan sobrevivir hasta los 40 o 50 años como es en los países desarrollados".
No obstante, manifestó que "en este momento nosotros tenemos un promedio de sobrevida de 27 años. Hace 15 años el promedio de sobrevida era de menos de 10 años, por lo tanto no era una enfermedad de adultos, era una enfermedad de niños".
Finalmente recalcó que "lo primero que tenemos que tener en este país, y en eso estamos trabajando fuerte, es hacer diagnósticos al momento que nace la guagua, que es lo que se llama tamizaje neonatal, si eso no se logra hemos hecho mucha educación médica para que se fijen en algunos síntomas como los cuadros bronquiales obstructivas a repetición, un niño que no se desarrolla bien, que sufre de diarreas, que está hinchado o que la alimentación no le cae bien".