Andres Perez, El Mercurio
SANTIAGO.- Ya se cumplen cuatro días desde el inicio de la toma feminista del campus Casa Central de la Pontificia Universidad Católica que comenzó el viernes de la semana pasada.
Tras la extensa reunión de este domingo, que se prolongó por más de cuatro horas, entre las voceras de la toma y el rector Ignacio Sánchez,
se llegó a una propuesta que deberá ser votada por la asamblea.
Tras la reunión, Sánchez dijo que se redactó un acta que fue firmada por todos los participantes y que espera "
una respuesta positiva y que incluya una definición de entrega de la Casa Central" tras la votación de las estudiantes en toma.
Durante esta mañana, en T13, la autoridad aseguró que no habrá un desalojo "inmediato". "Yo estoy esperando la respuesta de ellas y les he asegurado que pueden estar tranquilas en la noche en su toma de decisiones", sostuvo.
También explicó que él no busca "andar haciendo sumarios ni andar desalojando espacios de la universidad (...) pero también les he dicho (a las estudiantes) que el campus sigue trabajando, que hay estudiantes y profesores que me piden tomar cartas en el asunto porque están molestos con esta situación".
El rector puntualizó que el protocolo acordado tiene trabajos de corto, mediano y largo plazo. "Lo que acordamos con ellas es tener mesas de trabajo en cada tema, con representantes de la FEUC, de otros movimientos estudiantiles y rectoría, para trabajar en serio en protocolos y resultados".
