SANTIAGO.- Tras 46 días de la toma feminista de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, ayer el decano, Davor Harasic, presentó su renuncia ante el rector de la casa de estudios, Ennio Vivaldi, lo que fue considerado hoy una "irresponsabilidad política" por parte de las estudiantes movilizadas.
Esta tarde, Emilia Schneider, una de las voceras de la agrupación, aseguró que "consideramos una irresponsabilidad política la renuncia del decano pues da cuenta de su incapacidad para hacerse cargo de nuestras demandas" y agregó que "hoy la lucha que estamos levantando también implica un cuestionamiento profundo a la democracia al interior de nuestras instituciones".
"Nosotras queremos dejar bien claro que la intención de esta movilización nunca fue la denuncia del decano. Nosotras nunca exigimos la renuncia del decano"
Danae Borax
En esa línea, Danae Borax, también vocera de la toma, enfatizó en que "nosotras queremos dejar bien claro que la intención de esta movilización nunca fue la denuncia del decano. Nosotras nunca exigimos la renuncia del decano".
Asimismo, Isidora Parra, otra de las voceras, aclaró que "la toma fue la única vía de movilización que nosotras encontramos para poder profundizar las problemáticas que vivíamos como comunidad universitaria".
Por otro lado, al presentar la renuncia, Harasic argumentó que esta toma ponía en riesgo el proyecto educativo del plantel, lo que fue desestimado por las voceras hoy. "Nuestra movilización no viene a perder la excelencia de la Universidad de Chile, sino todo lo contrario, busca democratizar la universidad que es del país y de todos los chilenos y chilenas" y agregaron que las demandas "no solo afectan a las estudiantes sino que también a las académicas".
Las voceras reiteraron que sin esta movilización "no se habría podido poner el tema en nuestra agenda nacional" y le respondieron al ministro Gerardo Varela, quien hoy pidió unirse al diálogo con el Gobierno que "no nos vamos a sumar a una mesa sin que todas nuestras compañeras hayamos tomado de manera horizontal la decisión de tener diálogo con el gobierno, decisión que hoy día no existe".
Llamado al diálogo
Ante la solicitud de Ennio Vivaldi a Davor Harasic de "recapacitar su renuncia", Emilia Schneider fue enfática en que "no nos vamos a involucrar en la petición de la recapacitación de la renuncia del decano porque creemos que hay una responsabilidad histórica y una movilización encima que es mucho más relevante que es avanzar en las demandas".
Sin embargo, hicieron un llamado a las autoridades, especialmente a la rectoría, a "mantener abiertas las puertas del diálogo, recibir nuestro petitorio, estar dispuestos a conversar".