SANTIAGO.- Con arraigo nacional y prohibición de acercarse al policía que le disparó, quedó el conductor de Uber que esta tarde fue formalizado por los delitos de atentado contra la autoridad y maltrato a obra de Carabineros.
El conductor, que fue identificado como Rodolfo Muñoz Donoso (21 años), fue herido a bala amoche tras supuestamente negarse a que le requisaran su auto. Ante ello, y cuando intentaba avanzar sobre el carabinero, éste usó su arma e servicio.
El fiscal Eduardo Baeza explicó que antes del incidente el vehículo Uber había dejado a dos pasajeros, quienes reconocieron a Carabineros que era un un conductor que presta servicios a la aplicación que el Gobierno busca reglamentar.
En ese momento, Muñoz se negó a mostrar sus documentos para ser controlado, subió los vidrios, cerró con seguro y "arremetió seis veces contra el funcionario policial que terminó con heridas leves", según el persecutor.
Agregó que en el Hospital El Carmen, donde fue derivado, calificaron la lesión en el hombro izquierdo como "leve", por lo que señaló que nunca estuvo en riesgo la vida del imputado.
Por su parte, la abogada del conductor, María Paz Bahamondes, se opuso a toda medida cautelar y pidió declarar ilegal la detención, usando como argumento el polémico video que se viralizó en redes sociales.
De hecho, aseguró que "no existe ningún tipo de delito para controlar su detención", y acusó al carabinero de reaccionar de forma "desproporcionada".
Asimismo, la defensora aseguró que su representado, que no tiene condenas previas, nunca quiso dañar al funcionario policial.
El tribunal dio un plazo de 60 días para la investigación.
