SANTIAGO.- La Ley 20.606, que tiene como principal objetivo prevenir la obesidad infantil, cumple hoy un importante hito: A dos años de su implementación, la norma comenzará a ser más restrictiva.
La legislación mejora información nutricional que se entrega a los clientes a través de la incorporación obligatoria de octógonos con la advertencia frontal en el producto de "Alto En" calorías, grasas saturadas, azúcares y sodio. Además, restringe la publicidad dirigida a menores de 14 años de los alimentos sellados y prohíbe la venta de estos en establecimientos educacionales.
A partir de hoy aumentarán los requisitos en todos los alimentos sólidos y líquidos. En los primeros, se exigirán los siguientes límites cada 100 gramos de alimento: 5 gramos de grasas saturadas, 15 gramos de azúcares, 300 calorías y 500 miligramos de sodio máximo. De acuerdo a la autoridad, como esto "probablemente van a ver más productos que antes no tenían sellos que van a tenerlos".
Evaluación
Según la subsecretaría de Salud Pública, Paula Daza, la percepción que ha tenido la ley hasta el momento "ha sido positiva". "Más de un 90% de las personas tienen una evaluación positiva y reconocen que entienden lo que significan los sellos", señaló a Radio Universo.
Según los resultados de la encuesta "Nueva Ley de Etiquetado de Alimentos" realizada por Demoscópica y la Universidad de Chile, por encargo del Minsal, el 67,8% de las personas consultadas dice ser influida por el sello en los alimentos ya que eligen los que tengan la menor cantidad.
"No podemos decir que esto tenga un impacto en (…) que la persona va a comer más sano o que la obesidad en Chile ha bajado producto de esta política. Sin embargo, hasta el minuto los resultados que nosotros tenemos de las evaluaciones han sido positivas", recalcó la subsecretaria.
Otros de los resultados que resaltan en el informe es la percepción que tienen las personas al ver un producto sin estos sellos, ya que el 47,3% piensa que estos son saludables, en contraste al 25,7% de personas que al ver productos con sellos piensa que debería dejar de comerlos.
La jefa de División de Políticas Públicas Saludables y Promoción del Minsal, Daniela Godoy, comentó a Emol que desde el ministerio, "nosotros realizamos más que nada estudios de percepción, que nos indican que alrededor de 4 de cada 10 personas están declarando que los sellos de advertencia influyen en sus compras y selección de productos. (…) Pero, para ver si efectivamente hay cambios en la conducta de compra que estamos esperando con esta política, tenemos que esperar la aplicación completa de la ley". Esta estará en regla totalmente en 2019.
Distinta es la opinión que tiene el presidente de la Asociación de Alimentos y Bebidas, Rodrigo Álvarez, quien aseguró que en el gremio no ven cambios en las conductas. "Nosotros hemos hecho algunos estudios (…) nuestra principal encuesta demuestra que las que la ventas de cadenas de comercialización están iguales al inicio de la campaña", explicó a Radio Universo.
"Debería haber una preocupación de los padres y el Estado para explicar qué significan los sellos, ya que las personas no entienden lo que les están diciendo", recalcó.
Fiscalización
Según cifras del ministerio, hasta el momento se han aplicado 2.500 sanciones por parte de la autoridad, de los cuales se han abierto 24,8% de sumarios. De estos, los establecimientos educacionales han sido los más amonestados por vender productos "Altos En".
Pero desde los inicios de la ley, ha bajado 22% el incumplimiento de esta en lugares de expendio, lo que llegó a finales de 2017 a 16,4%.
67,8%De las personas elige entre los productos el que menor cantidad de sellos tenga
De acuerdo al Minsal, la seremi fiscaliza en los lugares donde hay mayor cantidad de productos con sellos de advertencia (enfoque de riesgo) y, principalmente, a ciertos productos que son consumidos por las familias a lo largo de todo Chile. Según Godoy, la industria tiene un cumplimiento del 75%, si la seremi "detecta incumplimiento, amonesta a la empresa o la industria y tienen un tiempo para dar cumplimiento con ese producto. Si la empresa cumple, no se le cobra multa, si la empresa no cumple se cobra una multa que es relativa".
El informe de la Universidad de Chile concluye que "se asume que la tarea de cambio de hábitos es una labor de mediano y largo plazo que requiere de esfuerzos persistentes y continuos para fortalecer el mensaje, logrando que la población en general (…) puedan aprehender nuevas formas de alimentación".
