SANTIAGO.- Entre enero, febrero y marzo de este año, treinta adultos y menores de edad ligados al Servicio Nacional de Menores (Sename) fallecieron en distintos contextos.
Así lo reveló un informe reservado enviado a las comisiones de Constitución y de Familia de la Cámara y el Senado, el cual fue hecho público por el diputado independiente René Saffirio.
De estos decesos, 14 corresponden a menores de 18 años, resaltando algunos casos por la violencia con la que ocurrieron. Por ejemplo, una joven de 17 que falleció producto de un traumatismo cráneo encefálico provocado por una bala, mientras que otro menor fue asfixiado. Además, se registra la situación de un pequeño de 2 años que se electrocutó. Suicidio, homicidio e intoxicación por drogas son otras de las causas.
Ante esto, durante la tarde de este martes el
Servicio Nacional de Menores aclaró que los fallecidos no estaban al interior de centros del organismo. "La mayoría de ellos estaban en programas ambulatorios (área de protección) o cumpliendo una sanción en libertad (justicia juvenil), lo que significa que vivían en sus casas y estaban a cargo de sus redes familiares", detalla el texto.
Asimismo, el ministro de Justicia, Hernán Larraín, lamentó la situación y reiteró que "ninguno de los niños que murió era residente en un centro del Sename. Algunos de estos niños estaban en programas ambulatorios, es decir con sus familia, pero atendidos en programas, y otros eran infractores juveniles que no estaban en centros cerrados, sino que en libertad y por lo tanto fuera del control de estos organismos".
En concreto, cinco de los menores estaban cumpliendo medidas en libertad dispuestas por los Tribunales de Justicia, mientras que el resto estaba en programas ambulatorios o en recintos para personas con discapacidad severa.
En tanto, los ocho adultos contemplados en la nómina corresponden a personas que cometieron delitos mientras eran menores de edad, y que cumplían alguna sanción de acuerdo a la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente.
De estos, cinco fallecieron mientras cumplían medidas en libertad, y, en su mayoría señalaron desde la cartera a través de un comunicado, "murieron de manera violenta por intervención de terceros". Así también precisaron que "el régimen semicerrado es una sanción que implica que el condenado debe dormir en un centro que funciona especialmente para estos fines, y el adulto que falleció bajo este régimen no estaba al interior del centro".
Cada uno de estos casos fueron informados a los tribunales de Familia o de Justicia, según correspondía, además de ser denunciados ante el Ministerio Público, con el fin de que se determinen posibles responsabilidades.