SANTIAGO.- El miércoles pasado, salió desde el Congreso Nacional una carta firmada por la presidenta de la Cámara de Diputados, Maya Fernández (PS), y los vicepresidentes Jaime Mulet (FRVS) y Mario Venegas (DC). El destinatario fue el propio Presidente Sebastián Piñera y el objetivo fue expresar una "profunda molestia", luego de que el Mandatario los emplazara a "ponerse a trabajar".
En respuesta, parlamentarios oficialistas anunciaron que evalúan una moción de censura contra la mesa de la Cámara, acusando que actuó en representación de toda la corporación sin previa consulta a los jefes de comité de la oposición ni tampoco a ellos, y denunciando uso político del cargo.
Al respecto, en conversación con radio Universo, Fernández aseguró este lunes que "fue una decisión que conversamos con la mesa" y señaló que "miramos los artículos del reglamento y sí podíamos mandar una carta".
"Es una Cámara política, partamos por eso. Yo tengo militancia, somos oposición, ganamos la mesa política con votos y, por tanto, siempre habrá opiniones políticas y tenemos diferencias. Eso es el Congreso", añadió.
También aseguró que, de no hacerlo, podría haber sido criticada por el motivo contrario. "Alguna bancada me podría decir que como presidenta no cumplí mi función al no defender al Congreso, cuando fue denostado (...) El rol nuestro es justamente salvaguardar la independencia y la autonomía del Congreso", afirmó.
Y es que, para la parlamentaria, la carta fue "una defensa a todos los diputados de todos los sectores". "Podemos tener crítica política, opiniones políticas, pero lo que no puede ocurrir y que finalmente tenemos son los insultos", señaló.
"Jamás se me ocurriría decir que el Gobierno no trabaja, porque los veo trabajar permanentemente. No podría decir que el Presidente de la República no trabaja, porque eso no corresponde", declaró.
Sobre la molestia en el oficialismo, aseguró que entiende que "el rol de los parlamentarios de Gobierno es defender al Presidente". "Pero yo quiero que entiendan que esto fue una defensa a una institución democrática como el Congreso, que tenemos que proteger, que trabaja".
"Tal vez no podemos transmitir todo lo que hacemos, pero el Congreso desde que partió el 11 nunca ha parado", añadió. Además entregó una cifra: la cantidad de oficios fiscalizados desde esa fecha a hoy "ya son los mismos o más que lo que tuvimos en los cuatro años del periodo pasado".
"Jamás hemos boicoteado un proyecto, siempre hemos respetado las urgencias", aseguró. Y la carta, a su juicio, fue "extremadamente respetuosa" y un "llamado al diálogo" para "avanzar".