SANTIAGO.- Es el miembro del gabinete del Presidente Sebastián Piñera que probablemente más polémicas ha sumado en estos cuatro meses de Gobierno. Es por ellas que incluso hasta debió enfrentar una acusación constitucional, que aunque no prosperó, lo tuvieron en la primera línea de la agenda mediática por varios días.
Las cifras del VIH y el reglamento de aborto eran hasta ahora las tensiones que había tenido que manejar. Pero hoy el
ministro de Salud, Emilio Santelices, está nuevamente en la palestra luego de que se conociera que
adquirió acciones por $40 millones de la empresa Sonda, la que mantiene contrato con Fonasa pudiéndose generar entonces un eventual conflicto de interés debido a su cargo y a su pasado como asesor de la entidad pública.
Según reveló el reportaje de Ahora Noticias, basándose en la declaración de patrimonio del secretario de Estado, los títulos fueron adquiridos en marzo de 2018, sin embargo,
él aclaró esta mañana que se compraron en julio de 2017 e hizo que fueran vendidas para evitar suspicacias.
No es primera vez que el ministro es cuestionado por un eventual conflicto de interés, pues cuando asumió el cargo era propietario del
1% de las acciones de la Clínica Las Condes, las que aseguró se vendieron. Ahora por los papeles de Sonda, la comisión de Salud de la Cámara de Diputados anunció que será citado a declarar ante ellos para que explique esta situación.
Aborto, polémica que aún no termina
Pero hace menos de un mes, Santelices vivió otro complejo conflicto político -que aún no se ha terminado- por la redacción del
protocolo de aborto que él impulsó.
A menos de doce días en el cargo, el ministro firmó un decreto con el que modificó el que había dejado la administración de la ex Presidenta Michelle Bachelet respecto a la aplicación de la objeción de conciencia en el marco de la Ley de aborto en tres causales. Según el Gobierno anterior, las clínicas privadas no podrían recibir recursos del Estado si se declaraban objetoras, no obstante, Santelices estimó lo contrario y permitió que continuaran percibiendo recursos fiscales.
Eso generó que el Partido Socialista acudiera a la
Contraloría, la que finalmente
declaró ilegal el decreto y lo obligó a elaborar un nuevo texto, esta vez con categoría de reglamento.
En paralelo, la diputada Marcela Hernando (PR) impulsó una
interpelación en su contra y el Frente Amplio fue más allá y lo
acusó constitucionalmente. El pasado 20 de junio la Cámara revisó la acción, pero no prosperó debido a que la oposición no llegó a acuerdo y se rechazó.
Pasado todo este enfrentamiento con el Congreso, el secretario de Estado presentó a principios de este mes un nuevo reglamento tras un extenso trabajo con la propia Contraloría y la Segpres -el texto aún no es oficial ya que se encuentra en revisión de la Contraloría-. Pero la
UDI ya anunció que acudirá al Tribunal Constitucional debido a que el documento es prácticamente igual al redactado por el Gobierno de Bachelet. Según argumentan, la idea es que La Moneda deba explicar ante los jueces que a causa de la orden del órgano contralor, tuvo que actuar de forma inconstitucional.
Las cifras del VIH
Otro asunto por el que fue cuestionado el titular del Minsal fue por las
cifras del VIH. En abril pasado
advirtió que la mortalidad en Chile a causa de este virus, es más del doble que el promedio mundial. "Las referencias mundiales son que fallecen 1,2 pacientes por cada 100 mil habitantes, en el caso de Chile es de 2,9 por cada 100 mil habitantes. Es decir, en el caso de Chile, se triplica la mortalidad en comparación a los otros países", dijo el ministro Santelices el día 11 de ese mes.
Seis días después y luego de que se encendieran todas las alarmas al respecto, el mismo secretario de Estado salió a aclarar los datos y reconoció que lo dicho anteriormente se pudo haber "prestado para confusión".
"La cifra de mortalidad efectivamente es de 13 por 100 mil. Lo que yo he señalado y
puede que se hayan prestado para confusión, es que en nuestro país la cifra actual que tenemos es de 2,9 por 100 mil, que está muy lejos de la meta que nos habíamos propuesto de 1,2, la que incluso es superior a la mortalidad que teníamos en el año 2005 que era de 2,3", puntualizó esa vez.