El último caso ocurrió en una sede social que fue clausurada por Carabineros.
Agencia Uno
SANTIAGO.- En casi 48 horas, dos casos de presuntos abusos sexuales cometidos por
menores de 14 años ocurrieron en
Santiago. El primero fue en el
Parque Los Reyes, ocasión en la que Carabineros detuvo en flagrancia a dos jóvenes de 13 y 16 años; mientras que el segundo ocurrió
Pudahuel, y en el cual aún se investiga la comisión de algún delito sexual por parte de tres menores de 8, 9 y 12 años.
En el primer caso, el joven de 16 años fue formalizado; mientras que en el segundo, los niños están siendo buscados por Carabineros y ya estarían identificados.
Ante esto, en conversación con Emol, el gerente de la Fundación San Carlos de Maipo, Marcelo Sánchez, advirtió el hecho de que los jóvenes actuaran en grupo.
"Cerca de 50% de los internos han participado en bandas a temprana edad. La influencia de los pares es algo que tenemos que hacernos cargo, ya que aquí hay un comportamiento que busca generar dinámicas de poder. (Los menores) tienen como primera necesidad ratificar su identidad en el grupo, más que ver si la justicia los va a tocar o no", afirmó.
En esa línea, también señaló que es necesario reformar la ley de tribunales de Familia, "para que los jueces tengan facilidad de derivar a una instancia antidelito a los niños que solo son mirados como vulnerados en sus derechos", agregando que "el Estado debe trabajar para abordar el tema delictivo incluso en menores de 14 años: hay que potenciar terapias multisistémicas y los programas de crianza".
"Hoy no existe una mirada preventiva, sino que más bien punitiva. Se discute bajar la edad para la imputabilidad, pero eso no va a bajar nada"
Marcelo Sánchez
Así también, el representante de la fundación que trabaja con distintos grupos vulnerados, entre ellos los infantes, destacó la necesidad de contar con una intervención temprana, precisando que estos "deben volver a ser escolarizados y tener garantizado un tratamiento de salud mental. Aquellos que tienen un tratamiento de drogas son los que están bajo la ley penal adolescente, entonces los inimputables tienen que crecer y delinquir para tener alguna atención mental".
Programa Lazos
La subsecretaria de la Niñez, Carol Bown, dijo a este medio que "en primer lugar, lo que tenemos que hacer es visibilizar el tema, saber que existen menores de 14 años que entran en conflicto con la ley y tenemos que hacernos cargo de esta realidad y tomar medidas para romper este círculo y evitar que se cronifique este tipo de conductas".
Agregó que "como Gobierno y desde la Subsecretaría de la Niñez estamos trabajando en lo preventivo, en evitar que se produzcan este tipo de situaciones, pero una vez que un menor de 14 años entra en conflicto con la ley, debemos tomar medidas y para eso estamos trabajando en dos líneas".
Según explicó la subsecretaria, una es el fortalecimiento del programa Lazos, en conjunto con Prevención del Delito, a partir del cual se trabaja con la terapia multisistémica y el fortalecimiento de las habilidades parentales.
"Este es un programa que hoy existe pero que queremos fortalecer, pero además trabajar con menores de 14 años, porque en general se hace con niños mayores de 14 años que entran en conflicto con la ley por primera vez", señaló.
"Y por otra parte, hemos establecido en el acuerdo nacional por la infancia que en la oferta del nuevo servicio de protección especializado vamos a incluir una oferta programática para aquellas niños que están en programas ambulatorios o residencias del Sename, que son menores de 14 años y que han entrado en conflicto con la ley", explicó.
"Tenemos que revisar cuáles son las causas que los han llevado a esto. Mucho más que bajar la edad es revisar por qué estos niños están llegando a esas conductas"
Subsecretaria Carol Bown
"Aun cuando sean inimputables debemos trabajar para poder terminar con esta situación y evitar que en el futuro se transformen en carreras delictuales", afirmó Bown, quien agregó los lineamientos del Gobierno en la materia.
"Tenemos que revisar qué es lo que está pasando en el entorno de estos niños, verificar si ellos también han sido víctimas y, en ese caso, trabajar con ellos y repararlos. Y también ver como sociedad qué es lo que está pasando con el acceso a la pornografía, el acceso a normalizar conductas de violencia y de violencia sexual", concluyó.
