SANTIAGO.- Desde el viernes pasado alrededor de 80 familias se instalaron con carpas en una cancha de fútbol ubicada en villa Los Jardines, en la comuna de Ñuñoa, como medida de presión para exigir soluciones habitacionales. Una de las peticiones es el uso de esa misma cancha, propiedad del Instituto Nacional de Deporte (IND), como terreno para construir viviendas sociales.
La gran mayoría de los vecinos que se tomaron el terreno son del comité de Allegados Jorge Monckeberg, los cuales exigen que les construyan viviendas sociales en Ñuñoa, la misma comuna donde residen.
Respecto a esto es que hoy en plena reunión entre el ministro de Vivienda y Urbanismo, Cristián Monckeberg, y los alcaldes de distintas comunas, incluido Andrés Zarhi alcalde de Ñuñoa se conversó sobre posibles soluciones habitacionales integradas dentro de la ciudad y conectadas con los servicios y el transporte.
Luego de la cita el ministro se manifestó contrario a la medida de presión, asegurando que "
las tomas, que a veces surgen con motivo de estos debates, no dan derecho a saltarse la fila. Sabemos que detrás de una toma hay angustia, pero detrás de una toma también hay familias. Y sabemos también que hay muchas familias que optaron por no tomar ese camino, se han inscrito y están esperando una solución habitacional".
Esto debido a que la forma por la cual los vecinos de sectores medios y vulnerables pueden optar a una vivienda social es a través de ministerio de Vivienda y Urbanismo, el cual les va asignando las casas, con los respectivos requisitos que tengan, a medida de que se abran cupos en nuevos proyectos de viviendas sociales.
Según el jefe de la cartera, las familias en toma tienen que pasar por el mismo proceso que pasan todos para acceder a una vivienda social, "vamos a dar una señal clarísima en ese sentido, a tratar con dignidad a todas las familias, lo que tomaron esa decisión, como los que no la han tomado, pero hay un procedimiento, hay reglas y a no saltarse la fila porque no es la mejor solución", finalizó.