A las afueras del Liceo Gabriel González Videla.
Por Pía Larrondo
SANTIAGO.- A las 14:00 de este lunes se dieron inicio de forma oficial las clases del segundo semestre de los 739 estudiantes del Liceo Luis Amunátegui. Esto, en medio del rechazo de apoderados, exalumnos y cinco concejales a la medida tomada por el alcalde de Santiago respecto al cierre y traslado de los alumnos al Liceo Gabriel González Videla tras el incendio ocurrido en una toma el pasado 16 de junio.
Los alumnos entraron con una semana de retraso a clases debido a que el establecimiento que los recibe tuvo que ser intervenido para tener la capacidad correspondiente.
Luego del inicio de la jornada para los alumnos del Amunátegui que comenzará todos los días a las 14:00 y se extenderá hasta las 19:30, los apoderados del Amunátegui expresaron su descontento a través de pantacartas, carteles y cánticos fuera del Gabriel González Videla, por el traslado a un colegio que, según ellos, no tiene la capacidad para recibir a sus hijos.
"El alcalde se comprometió a poner buses y sólo fueron dos buses (...) alumnos se quedaron abajo, esto tiene un costo importante para las familias, hay un sinfín de perjuicios. Se ha mermado su derecho a la educación", expresó Sonia Araya, la vocera de los apoderados, que además señaló que este no los ha querido escuchar.
Uno de los puntos en los que los apoderados demostraron mayor desacuerdo fue la determinación de acortar las horas académicas de 45 a 35 minutos para asegurarse de que los estudiantes revisen todos los contenidos curriculares que establece el ministerio.
Sobre este ítem, Irací Hassler (PC), concejala de Santiago y presidenta de la comisión de a Educación explicó que esta reducción de hora está "perjudicando el proceso pedagógico, han tenido también que trasladarse a un lugar distinto que no conocen (...) lo que ha generado problemas a quienes tienen preuniversitario, quiénes no podrán hacerlo porque genera un tope de horario con la jornada de la tarde".
Además expresó que esta medida de cierre del colegio se debe a una forma de "castigo" de parte de Alessandri, ya que se gastaron 30 millones de pesos en el arreglo del Liceo Gabriel González Videla para que recibieran a los alumnos, "en los 51 días que lleva cerrado el liceo Amunátegui, perfectamente se podría haber arreglado la sala de profesores que fue afectada por este incendio y no tendríamos que perjudicar a ambas comunidades".
Por otra parte, respecto a que no sea posible que los estudiantes puedan retomar las clases en su establecimiento original ubicado en calle Agustinas 291 a partir del próximo año, la directora de Educación de la municipalidad de Santiago, Yoris Rojas, enfatizó en que el en marzo de 2019 no volverán al recinto original pero que tendrán otro habilitado y que las reparaciones no han comenzado porque "eso está sujeto a que nos entreguen, de parte del ministerio, los recursos para recuperar el establecimiento".
Es por estos supuestos problemas que los concejales Irací Hassler (PC), Rosario Carvajal (ind), Natalia Contreras (RD) y Alfredo Morgado (PPD), interpusieron un recurso de protección ante Contraloría y esperan que el ente entregue un dictamen en los próximos días por considerar "ilegal" el cierre del Liceo.
