SANTIAGO.- Hace "más de tres meses", el arzobispo de Concepción, Fernando Chomalí, solicitó una reunión con el Papa Francisco en Roma con el fin, según dijo, de abordar la crisis al interior de la Iglesia chilena producto de los abusos sexuales y de poder ejecutados por clérigos. La cita finalmente se concretó ayer, el mismo día en que el Sumo Pontífice aceptó las renuncias de los obispos de Chillán, Carlos Pellegrín, y de San Felipe, Cristián Contreras.
Chomalí, a través de un comunicado, señaló que no solo mantuvo un encuentro con la máxima autoridad de la Iglesia católica, sino que también con el oficial de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Jordi Bertomeu -con quien almorzó- y con el embajador de Chile en el Vaticano, Octavio Errázuriz.
Respecto al encuentro con el Papa, el jefe de la segunda arquidiócesis más grande del país explicó que le expresó su colaboración para terminar con los abusos y pudo "interiorizarlo de la situación en la que se encuentra nuestra Iglesia después de su visita a Chile (en enero), en relación a las denuncias por abusos y allanamientos".
También dijo que volvió a presentarle su renuncia a Francisco, la cual fue rechazada. "El Santo Padre me animó a continuar con el decidido impulso que la arquidiócesis le ha dado al trabajo con los más postergados de la sociedad", recalcó.
Con los datos expuestos por Chomalí en la mano, expertos analizaron con Emol la segunda reunión que ha mantenido el Papa con un obispo chileno desde el viaje de toda la Conferencia Episcopal al Vaticano en mayo pasado, instancia donde todos los miembros presentaron sus renuncias.
Fuente de información
"Yo creo que Chomalí está siendo una fuente de información para las decisiones que vienen. Eso es lo relevante de notar. Puede ser que se haya reunido con Bertomeu y no solo haya sido para hablar sobre los casos ya denunciados, sino también para analizar futuros nombramientos episcopales", manifestó el teólogo y doctor en filosofía de la Universidad de Chile, Álvaro Ramis.
El experto también agregó que "aquí lo que uno podría leer entre líneas es que él (Chomalí) está oficiando como una cierta fuente de información respecto al curso de acontecimientos en Chile y a escuchar qué necesita Roma respecto al caso chileno".
Por su parte, Roberto Ríos, de Voces Católicas, estimó que Chomalí "ha sido uno de los obispos que cuenta con la confianza del Papa hoy día. Se ha convertido en uno de los que el Papa consulta, es referente y le tiene gran confianza".
Junto con ello, recordó que "no es la primera vez que el obispo Chomalí se reúne con el Papa a conversar temas de la Iglesia. Ya lo hizo respecto al obispo (Juan) Barros hace algún tiempo", el año 2015, cuando le comunicó las consecuencias de haber nombrado al discípulo del ex párroco de El Bosque Fernando Karadima como obispo de Osorno. Aviso que no fue considerado por el Sumo Pontífice en su momento.
"(Chomalí) Ha sido uno de los obispos que cuenta con la confianza del Papa hoy día. Se ha convertido en uno de los que el Papa consulta, es referente y le tiene gran confianza"
Roberto Ríos
En tanto,
el doctor en historia y especialista en Iglesia católica, Marcial Sánchez, sostuvo que "creo que fue una visita importante por la gente con que se reunió (...). Su visita fue para conversar con el Papa y manifestar lo que él piensa sobre la crisis, lo cual me parece muy prudente".
Aunque Sánchez reconoció la posibilidad de que el Papa le haya pedido al arzobispo su opinión respecto a eventuales nuevos nombramientos, explicó que la visita de Chomalí tuvo "varios tenores", y uno de ellos, los problemas que se han suscitado en la arquidiócesis de Concepción, en el marco del allanamiento que hizo la fiscalía el pasado 13 de septiembre.
"Chomalí tiene algo claro: él sabe que en Concepción hay problemas y él tiene que solucionarlos. Por el comunicado que él dio a conocer (ayer), el Papa le dice que él tiene que seguir trabajando en lo que está haciendo. Le dijo: 'Mire monseñor, usted vino a verme, yo le agradezco la visita, pero usted tiene que seguir trabajando donde está", añadió.
¿Chomalí arzobispo de Santiago?
Cuando hace algunos días se conoció la noticia de que Chomalí viajaría a Roma, algunas voces lo postularon como una carta altamente probable para reemplazar al cardenal Ricardo Ezzati al frente del Arzobispado de Santiago, en caso de su eventual salida.
Sin embargo, el obispo penquista enseguida desechó dicha postulación. "Lo descarto absolutamente", enfatizó.
"Él tiene problemas en su diócesis, sería bastante absurdo que saquen a un obispo de un lugar para llevarlo a otro y el primero lo dejaran con problemas. Hoy día hay problemas en esa diócesis e investigaciones en esa diócesis. Recién fue allanada".
Marcial Sánchez
Y es que son justamente los problemas que existen en la iglesia de Concepción los que, a juicio de los expertos, impedirían el arribo de Chomalí a Santiago.
"Él tiene problemas en su diócesis, sería bastante absurdo que saquen a un obispo de un lugar para llevarlo a otro y al primero lo dejaran con problemas. Hoy día hay problemas en esa diócesis e investigaciones en esa diócesis. Recién fue allanada", apuntó Sánchez.
En ese sentido, calificó como una decisión "muy cuerda" que el sacerdote diga que "no le interesa" reemplazar a Ezzati, "porque está preocupado de sus diócesis antes de asumir otras responsabilidades".
Misma impresión es la de Ramis, quien afirmó que "una cosa es informar y otra es que se le asignen nuevas tareas. Él tiene algo en la arquidiócesis de Concepción en donde se le ha ido complicando el panorama".
"Entonces, puedo prever que sería compleja la designación de Chomalí como arzobispo de Santiago en el futuro", recalcó.
Por último, Ríos, de Voces Católicas, indicó que "le creo a Fernando Chomalí cuando dice que no está mirando al Arzobispado de Santiago como un objetivo personal. Personalmente no creo que hoy día pueda ser nombrado como tal".