"He esperado dos años para ser escuchada", dijo la ex ministra de Justicia.
José Alvujar, El Mercurio.
SANTIAGO.- Una a una respondió la serie de imputaciones que pesan en su contra la ex ministra de Justicia y ahora también ex consejera del Consejo de Defensa del Estado (CDE), Javiera Blanco, institución a la que renunció con el objetivo de abocarse por completo a la misión de que la justicia declare su completa inocencia.
En entrevista con El Mercurio, la ex secretaria de Estado acusó que "he esperado dos años para ser escuchada, porque de las tres causas en las que hoy día aparezco vinculada, en dos de ellas todavía no he podido declarar, queriendo hacerlo (…) En ninguna tengo responsabilidad alguna y no he podido señalarlo".
La primera de ellas es la investigación que la Fiscalía está realizando a las irregularidades ocurridas en el programa de Aseguramiento de Calidad de las Residencias y de Mejoramiento Continuo (Ascar) de residencias del Servicio Nacional de Menores (Sename), en la cual se le acusa de contratar personas que finalmente realizaron otras funciones.
Al respecto, Blanco recordó que en relación a ese tema "puedo indicar que fue un programa que a mí me tocó cerrar. Un programa que siempre estuvo previsto para ser transitorio. Me parecía que se debían reforzar las funciones del Sename y por eso me pareció importante cerrarlo.
Las personas que fueron contratadas para trabajar en Ascar, trabajaron en Ascar".
"Yo solo puedo dar cuenta de mi gestión", añadió, junto con explicar los motivos del cierre del programa. "La principal evaluación es que como programa transitorio, lo que tenía que hacer era enfatizar algunos aspectos y luego traspasarse al servicio, de manera que esas funciones se reforzaran en el servicio. Fue lo que ocurrió y por eso se cerró", dijo.
Las otras imputaciones
Sobre la segunda acusación, que apunta al supuesto mal uso de gastos reservados de Carabineros, donde existe un testimonio que indica que presuntamente habría recibido un sobre con dinero cuando era subsecretaria de la institución, durante el primer gobierno de Bachelet, la ex consejera del CDE reclama que nunca ha podido declarar en la causa.
"No he tenido la posibilidad de decir que nunca he recibido (fondos). Hemos pedido con mi abogada en reiteradas ocasiones ir a declarar y no hemos podido. Yo me tomé estos dos últimos meses sin goce de sueldo para dedicarme a esto. En los dos meses que he dedicado mi esfuerzo a esto no he logrado ser escuchada", indicó.
En cuanto al testimonio, respondió que "lo que entiendo es que hay una lista que entrega una de las personas que están vinculadas al caso fraude, que está privada de libertad. En esta incorpora mi nombre, pero lo que puedo decir respecto de eso es que nunca he recibido gastos reservados. Esto no lo he podido ir a señalar a la causa".
Finalmente, en la acusación referente a la contratación de asesores en Gendarmería, la ex ministra comentó que "es quizás la imputación más brutal respecto de lo injusto y lo absurdo que es responsabilizarme por la solicitud de comisiones de servicios, que es una vía de apoyar el trabajo de un ministerio que ha existido siempre".
"Se comprobó en la investigación de Contraloría que no había ningún vicio ni ilicitud administrativa de ninguna especie. Es una causa que está en consulta a ser archivada en lo penal. En ese caso sí tuvimos la oportunidad de ir a declarar con la fiscal Tania Sironvalle. En este último caso quedó en evidencia lo absurdo de la imputación y lo falso", concluyó.
