SANTIAGO.- La próxima semana el Congreso entrará de lleno a la discusión del Presupuesto 2019, pero desde ya se avizora una discusión a lo menos tensa, sobre todo luego de que el Gobierno presentara el detalle por glosa.
Los parlamentarios -de oposición y también oficialistas- no quedaron del todo conformes y hay al menos tres áreas donde el debate será complejo: cultura, ciencias y educación, específicamente por los fondos que reciben las universidades. De hecho, actores de estos tres mundos han manifestado sus reparos en voz alta.
Cuestionan la forma en que el Ejecutivo distribuyó los recursos y aunque desde La Moneda explican que no hubo reducciones en lo macro -excepto en Ciencias donde se disminuyó en $32 mil millones-, los representantes de la sociedad civil aseguran que se le quitó dinero a importantes instituciones.
Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio
Una de las discusiones más llamativas ha sido la que se ha dado en el mundo de la Cultura. Los recursos destinados a esta cartera representan un 0,4% del gasto público total, previsto en 73.470 millones de dólares para el próximo año.
Así parlamentarios con un pasado artístico, como la PPD Carolina Marzán o el oficialista Luciano Cruz-Coke (Evópoli) -que además fue ministro de Cultura en la primera administración del Presidente Sebastián Piñera- han salido a pedirle al Gobierno que reconsidere su decisión o redistribuya los recursos, junto a otros legisladores, como el diputado Marcelo Díaz (PS), cantantes, actores y directores de museos.
En lo concreto el erario propuesto por el Ejecutivo considera una reducción del 23,53% para seis instituciones culturales: Museo de Arte Precolombino (Fundación Larraín Echeñique), Matucana 100, Fundación Internacional Teatro a Mil, Teatro Regional Biobío, Balmaceda Doce Quince y el Museo Violeta Parra.
Desde el Gobierno han hablado que buscan "emparejar la cancha" incrementando el dinero destinado a centros de creación artísticas y también al patrimonio. Además a lo anterior hay que agregar que esta vez debe ponerse en marcha la instalación de las oficinas de este debutante Ministerio en todas las regiones del país.
De hecho, Pablo Verdugo, jefe de gabinete de la ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Consuelo Valdés, recalcó que el presupuesto del área crece en un 4%.
"Financiará la instalación definitiva del ministerio, y la inauguración y puesta en marcha de Centros de Creación Artística (Cecrea), en diversas regiones, infraestructura cultural cuyo énfasis principal es generar experiencias y procesos creativos a través de la convergencia entre las artes, la ciencia, la tecnología y la sustentabilidad en niños y jóvenes", detalló en una carta enviada a El Mercurio.
Ciencias
Algo similar podría ocurrir en el ámbito científico donde se debería poner en marcha el Ministerio de la Ciencia, Tecnología, Innovación y Conocimiento. Aun cuando todavía no se nombra un titular para la cartera, existe temor entre los investigadores y exponentes de estas ramas, de que por priorizar su instalación, se estén disminuyendo los recursos para la generación de conocimiento.
Un presupuesto cercano los $668.863 millones, $32 mil millones menos, tendrá esta área en comparación a lo que se destinó para el año en curso, según lo proyectado por el Gobierno, algo que podría cambiar eso sí en la discusión parlamentaria.
Los más críticos aseguran que con esto, esta administración demuestra "no tener interés por la ciencia" así como tampoco "confianza" en quienes la ejercen. "La comunidad científica esperaba que, a pesar de los recortes al Presupuesto general del país y dado el compromiso expresado por el Presidente y su ministro de Hacienda, de apostar a la ciencia y la tecnología como herramientas para avanzar hacia el desarrollo, el Presupuesto en esta área hubiera reflejado dicho compromiso", dijo al Diario Financiero la astrónoma y Previo Nacional de Ciencias Exactas 1997, María Teresa Ruiz.
"Esto va a tener consecuencias en el futuro tremendas, porque la calidad de los profesionales va a bajar", advirtió por ejemplo el académico de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile, Jorge Babul, en CNN.
Otro ha planteado que una reducción de este tipo produce un retraso y debilitamiento del proceso de desarrollo. E incluso desde el Consejo de Rectores (Cruch) enfatizaron que si no se revierte la situación, la creación de un nuevo Ministerio solo sería "un mero saludo a la bandera".
Universidades del Estado
Un flanco relacionado con el anterior es lo que ocurre con las universidades estatales. Según señalan, con las resignaciones ahora consideradas en el Presupuesto no se cumple con el compromiso de fortalecerlas y por ende se hace difícil la generación de más conocimiento.
Según explicó el presidente del Consorcio de Universidades del Estado (Cuech) no hay un aumento real para esas instituciones, sino que existe un déficit de 18 mil millones. Esta cifra en cambio fue reasignada para otros gastos del Ministerio de Educación.
"Lo que se entrega, se quita a los demás rubros que tienen que ver con la calidad y funcionamiento de las universidades. En la práctica, no se está dando nada, porque se están redistribuyendo los recursos", afirmó el presidente del Cuech y rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi.
Otra preocupación es qué ocurrirá con las universidades regionales ya que dicen que no se consideró asignar recursos nuevos para continuar con la implementación de los planteles estatales de Aysén y O'Higgins.
"Es bastante decepcionante que el Presupuesto no haya tenido un crecimiento mínimo para satisfacer proyectos y necesidades de las universidades, particularmente de las que están emplazadas en las regiones", sostuvo el presidente de la Agrupación de Universidades Regionales y rector de la Universidad de Playa Ancha, Patricio Sanhueza.
El debate en el Congreso en torno al Presupuesto entrará en su recta final la próxima semana y debería concluir antes del 30 de noviembre.
