SANTIAGO.- A diferencia de lo que ocurre en la mayoría de los balnearios del país, en donde se prohíbe el ingreso de mascotas y se sanciona con multas a quienes no cumplen con la ordenanza, en
Santo Domingo se habilitó una playa para que residentes y turistas puedan disfrutar del sol y el mar junto a sus perros. De los 850 metros de costanera que tiene la comuna, de los cuales 350 metros lineales corresponden a la Playa Sur y el resto a la Playa Norte, la zona asignada a mascotas se localizó en el extremo sur de la primera.