SANTIAGO.- Un nuevo caso de abuso en la Iglesia Católica se reveló este domingo:
Tito Rivera, ex rector de la Iglesia Las Agustinas y
nombrado por el cardenal Ricardo Ezzati, fue acusado de drogar y violar a un hombre de 40 años que fue a pedir ayuda porque tenía a su hija enferma en 2015.
Según informó Radio Bío Bío, la Fiscalía de Rancagua está investigando una demanda por indemnización de perjuicios por $350 millones en contra del Arzobispado de Santiago, dado que Ezzati conoció el hecho de boca de la víctima y, según la acción judicial, sólo lo abrazó, lo conminó a rezar por su victimario y le entregó $30.000.
Al respecto, el doctor en Historia y especialista en catolicismo, Marcial Sánchez, estimó que el cardenal es una de las personas que deben alejarse de la institución.
"No cabe la menor duda que Charles Scicluna tenía toda la razón cuando dijo en el encuentro que terminó hace poco en el Vaticano se estaba abriendo una caja de Pandora"
Marcial Sánchez
"Cada día que pasa
las sorpresas se siguen generando. Sinceramente creo que en esta oportunidad, más que lo que haya hecho o no el cardenal Ezzati,
estamos frente a una vulneración de la gente que tiene menos recursos, más humilde, de una persona que toca las puertas de la Iglesia porque tiene una hija enferma y que necesitaba de un recurso económico y
él se encuentra con un depredador como Tito Rivera que se lo viola después de drogarlo", manifestó Sánchez en entrevista con
EmolTV.
"Estos hechos que estamos empezando a conocer se van sumando a otros hechos que han ido saliendo y van denotando que efectiva y lamentablemente todo lo que hemos venido diciendo tiene un asidero muy potente y fuerte", añadió.
"¿Hay encubrimiento? Claro que lo hay; ¿Hay lentitud en los procesos canónicos? Claro que hay lentitud; ¿Hay falta de caridad cristiana por parte de los obispos, por parte de este arzobispo de Santiago (Ricardo) Ezzati? Claro que lo hay, hay una falta de humanidad con respecto a un hombre que le está contando una verdad tan dolorosa para entregarle $30.000 después de salir del confesionario", comentó el experto.
En esa línea, Sánchez sostuvo que "me van a sobrar las palabras para poder empezar a buscar todo tipo de adjetivos y sinónimos para poder decir que es un hombre que efectivamente no cumple un ápice de lo que significa ser un cardenal, más aún después de todo lo hemos visto y por todo lo que hemos dicho. Yo creo que ya es tiempo de que algunas personas se alejen de la Iglesia Católica chilena y él es uno".
"Pero al margen de eso, yo sinceramente creo que este sacerdote, que sabiendo de los antecedentes, igual se le manda en su momento determinado a cumplir una función importante dentro de las Religiosas Agustinas, aparte este hombre robaba, era un ladrón y la gente sabía al interior, tú dices: 'Qué corre por la cabeza de esas personas que no son capaces de darse cuenta en el dolor del otro'".
"Sinceramente no corre nada, son corazones duros, corazones de piedra, no son capaces de dinamizar o empatizar en lo mínimo con el otro y además muchos de ellos se llaman sacerdotes", agregó.
Por último, afirmó que "esto lo encuentro horroroso, ya estamos empezando a dar pasos en este rompecabezas que empieza a armarse y a develar una verdad que es dolorosa para un sector de la población, pero que ya tiene que empezar a salir y duela a quien le duela. Por favor que la justicia empiece a hacerse cargo pronto de acuerdo a estos malhechores (...) este personaje es un delincuente".
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