El Ejecutivo también pretende que se permita que colegios puedan realizar "procesos de admisión propios".
El Mercurio
SANTIAGO.- El Gobierno anunció que dividirá en dos el proyecto de ley "Admisión Justa" –que modifica el Sistema de Admisión Escolar (SAE)– con el fin de facilitar su tramitación en el Congreso, donde la oposición ya anunció su rechazo a la idea de legislar la iniciativa.
Para esto, enviará una indicación sustitutiva que modificará el texto, el que se encuentra en la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados.
Según detalló la ministra de Educación, Marcela Cubillos, el primer proyecto abordará sólo la admisión en los liceos de alta exigencia, donde el Ejecutivo estima que podría haber mayor nivel de consenso entre los parlamentarios.
La idea es permitir la "selección por mérito" en los liceos de alta exigencia académica a partir de séptimo básico, a través de pruebas, notas u otro mecanismo; asegurando que el 50% de la matrícula corresponda a alumnos vulnerables.
Prioridad a niños del Sename y con necesidades educativas especiales
Mientras que el segundo proyecto apunta a reformar distintos aspectos del sistema de admisión escolar en general. Uno de los cambios más importantes es que se modifican los criterios de prioridad que se consideran para asignar los cupos en un establecimiento.
Actualmente, la primera prioridad la tienen –en este orden– los hermanos de alumnos que están en ese colegio; el 15% de alumnos prioritarios; los hijos de profesores y de funcionarios del colegio; y alumnos que han dejado el colegio y luego regresado.
Lo que plantea ahora el Ejecutivo es que la primera preferencia la tengan los niños provenientes de residencias del Sename. "Los directores de esas residencias, que son quienes postulan a esos niños al colegio, nos han dicho que ellos son los que mejor saben cuál es el colegio apropiado para cada uno de los niños que tienen en sus residencias. Y, por lo tanto, nos parece fundamental otorgarle a ellos la primera preferencia en la elección", explicó la ministra Cubillos.
La segunda prioridad será para los menores con necesidades educativas especiales permanentes, como niños con autismo o síndrome de down. "(Ellos) tienen menos opciones (de colegios) y, por lo tanto, si ese niño no queda en el colegio de su preferencia las mamás terminan teniéndolos que mandar a colegios que no van a tener la integración y los cuidados que su niño requiere", señaló la autoridad.
En tanto, los criterios que rigen actualmente se agregarán a continuación de éstos, ampliando el de los hermanos consanguíneos a niños que vivan en el mismo hogar; y sumando como séptimo criterio que hasta un 30% de los cupos puedan ser completados en virtud de variables relacionadas con el proyecto educativo del colegio, incluyendo la excelencia académica.
Otra modificación relevante –también incluida en este segundo proyecto– es que se permitirá que los colegios que así lo deseen puedan realizar, con anticipación al inicio del SAE, "procesos de admisión propios". Aunque en el Mineduc aclaran que se mantendrá el sistema centralizado de admisión escolar.
