El subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla.
Álex Moreno, El Mercurio.
SANTIAGO.- Con "apego a la ley", así aseguró haber actuado el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, ante la compra que realizó de terrenos en Pucón, ubicados al interior de una comunidad mapuche en el sector de Quetroleufu, durante el 2009 y luego el 2012.
Tras regresar este lunes de sus vacaciones, Ubilla abordó personalmente la polémica: "Yo tengo la conciencia absolutamente tranquila, yo he actuado bajo el apego de la ley, siempre de manera transparente diciendo la verdad y cumpliendo todos los compromisos y de toda naturaleza, no sólo en mi condición de subsecretario, sino que también como ciudadano".
Con esto, detalló que tales adquisiciones las declaró oportunamente en sus declaraciones de patrimonio e intereses, hechas tanto "el 2010, cuando llegué al primer gobierno del Presidente Piñera, luego el 2014 cuando dejo el gobierno y el 2018", cuando asumió nuevamente en la segunda administración.
Asimismo, Ubilla dijo creer que este "es un tema en que hay una clara intencionalidad política de levantar un tema de esta naturaleza. Pero estoy tranquilo, como se lo informé en su momento al Presidente y al ministro del Interior, que se cumplen todos los estándares de legalidad y de transparencia que le exigen a una autoridad de gobierno.
"Hay un medio electrónico que intenta levantar un tema donde no lo existe y esa es la intencionalidad que yo relevo", acotó Ubilla.
Previamente, el subsecretario había explicado a través de una declaración pública que el terreno le había sido vendido por Guadalupe Moris Gajardo, una "chilena que no pertenece a ningún pueblo indígena". Por lo cual, las tierras no estarían bajo la Ley Indígena.
Consultado por la posibilidad de que el tema llegue a la justicia, el subsecretario consideró que "cuando hay aparentes diferencias nuestra institucionalidad establece que es el sistema judicial, la justicia la que debe resolverlo. Yo como ciudadano tendría que actuar y como ciudadano contrataré un abogado, si se llega a presentar algún tipo de querella, de nulidad o lo que corresponda para que me represente en los tribunales, porque estoy absolutamente tranquilo".
Finalmente, Ubilla fue tajante al señalar que “no tiene por qué generar un acto lícito un problema de orden político, ético o moral. Lo que generaría un problema de esa naturaleza o podría generarlo, es una situación que se inicia en un acto ilícito, y esto está demostrado que la propiedad no es tierra indígena a partir del año 2008, yo compré 2009, por lo cual no se genera esa interpretación de algunos parlamentarios”.