SANTIAGO.- El 3 de octubre de 2018, el cardenal Ricardo Ezzati llegó hasta la Fiscalía de Rancagua tras ser citado a declarar en el marco de las investigaciones por presunto encubrimiento de casos de abusos sexuales al interior de la Iglesia católica.
Sin embargo, aquella jornada el religioso optó por acogerse a su derecho de guardar silencio y se retiró del lugar sin pronunciar una palabra respecto al caso del ex canciller de Arzobispado de Santiago, Óscar Muñoz, formalizado por violación y abusos sexuales. La razón, dijo ese día su abogado, tenía que ver con discutir primero su sobreseimiento.
Esto último finalmente no ocurrió. La solicitud fue negada en primera instancia y luego en la Corte de Apelaciones de Santiago, motivando así que Ezzati renunciara a su cargo como arzobispo de Santiago.
Ante esta situación, su defensa recurrió a la fiscalía para ahora sí declarar. La petición, aseguró el fiscal regional de O'Higgins, Emiliano Arias, aún está siendo evaluada: "Aún no hemos resuelto si es que accedemos a que esta persona sea citada o no".
Y añadió: "(La declaración no) es esencial para tomar una decisión de un fiscal respecto la formalización o no de una persona".
Citación de Errázuriz
En el marco de las mismas indagatorias de la fiscalía de O'Higgins, el antecesor de Ezzati, Francisco Javier Errázuriz, llegó esta mañana al Centro de Justicia con un bastón y acompañado de dos personas para declarar en calidad de imputado.
"(Por el) cumplimiento o incumplimiento de obligaciones como arzobispo en este caso, en diversas causas que se mencionaron al darle a conocer sus derechos", indicó Arias, precisando que hasta el momento "no hay una apreciación de casos que él haya encubierto. No tenemos esa convicción y en el momento que la tengamos vamos a solicitar la formalización".
"Son aproximadamente 10 investigaciones y además una querella presentada en su contra presentada por (...) las víctimas de Fernando Karadima", completó.
El fiscal indicó además que la defensa del cardenal pidió, por temas de salud, que la cita no se extendiera por muchas horas y que se realizara en Santiago y no Rancagua.
"Son medidas que en nada alteran el normal desarrollo de la diligencia. Ya lo habíamos hecho antes con otros religiosos de avanzada edad", acotó.
Caso Karadima
Ayer, la 9a Sala del tribunal de alzada capitalino condenó al Arzobispado de Santiago a indemnizar, con $300 millones, a los tres denunciantes del ex párroco de El Bosque, Fernando Karadima.
En el fallo se reconoció que la Iglesia chilena "ha sido negligente en su proceder en términos tales que pueden ser calificados como propios de un encubrimiento que da origen a la configuración de un ilícito civil".
Y si bien en dicha instancia no se podía establecer la responsabilidad penal de los indagados, Arias destacó la importancia de la resolución para los casos que llevan adelante.
"Es un fallo muy trascendente, muy relevante (...) da cuenta sin duda de cierto estándar de culpabilidad en cuanto habla de la negligencia e incumplimiento de ciertas obligaciones en un solo caso. Ahora nosotros tenemos la posibilidad, como fiscalía, de analizar no solo uno, sino que todos los casos que fueron sometidos a conocimiento del Arzobispado de Santiago", aseguró.
Nuevo denunciante
En esa línea, informó que, conocida la sentencia de dicho tribunal y que la Iglesia no apelará, una persona se acercó ayer a la fiscalía para dar cuenta de su caso.
"Cada vez que hay un hecho procesal relevante se acercan más víctimas (...) Esperemos que esto se siga produciendo, siempre es sano conocer más casos", manifestó.
Ahora, el equipo investigador está coordinando la toma de declaración de esta posible nueva víctima.