El 70% de los alumnos que se titularon en 2017 lo hizo con posterioridad a la duración formal de sus carreras.
El Mercurio
SANTIAGO.- Uno de los temas que ha salido al debate en estos días, a raíz de los miles de estudiantes que están perdiendo la gratuidad, es cuánto demoran los jóvenes de la educación superior en terminar sus carreas.
En ese contexto, un estudio –realizado por el Foro de Educación Superior Aequalis– mostró que tanto las familias como el Estado deben incurrir en millonarios gastos para financiar la sobre duración –diferencia entre la duración formal y la duración real– de las carreras universitarias y técnicas.
Según el análisis –que consideró a los más de 200 mil titulados de la educación superior en 2017–, arrojó que el 70% de éstos (140 mil) se titularon con posterioridad a la duración formal de sus carreras o programas.
Eso implicó un gasto general de $460 mil millones y de 3,3, millones en promedio por alumno.
Más del 70% de ese monto fue financiado directamente por las familias y cerca del 25% lo cubrió el Estado a través de ayudas estudiantiles.
El Dr. Iván Navarro, presidente de Aequalis, sostuvo que "esta sobre duración es uno de los principales desafíos en la Educación Superior en Chile" y agregó que "la progresión académica debe ser prioritaria en las instituciones de educación superior, dado al alto impacto financiero en la familias y en el Estado".
Mientras que Fabián Riquelme, consultor a cargo de la investigación, afirmó que el gasto fiscal que esto provoca al Estado ($121 mil millones de pesos) "equivale a un tercio del gasto fiscal en gratuidad para IP y CFT 2019 o a la mitad de lo presupuestado en Becas Educación Superior 2019".
