SANTIAGO.- "Cada uno tiene el sistema político que quiera, lo que importa en este caso es que entre China y Chile estamos buscando con pragmatismo caminos que beneficien a ambos pueblos", dijo este jueves el Presidente Sebastián Piñera, evitando de ese modo criticar al régimen local tras su reunirse en Beijing con su par Xi Jinping.
La frase del Mandatario generó reacciones en Chile, desde donde se criticó la postura evidenciada por el jefe de Estado, quien ha impulsado una intensa agenda de defensa de los DD.HH. en Venezuela y Nicaragua, pero en esta oportunidad no abordó los históricos reproches hacia el rol del gigante asiático en esa materia.
Sin embargo, la posición del gobernante responde a una política que se ha replicado sin diferencias desde el retorno de la democracia a nuestro país, ya que los cinco presidentes que han viajado a China desde 1992
han evitado criticar públicamente al sistema político local -calificado como dictadura por distintas sociedades occidentales-, con miras a fortalecer los vínculos comerciales bilaterales.
De hecho, el ex Presidente Patricio Aylwin fue el primero en imponer esa postura, en la primera visita de Estado de un líder chileno a Beijing, la cual se produjo el 14 de Noviembre 1992. Ese día, luego de las cita con su par chino, Yang Shangkun, el ex gobernante abordó el tema, desestimando las críticas hacia el régimen comunista.
En un punto de prensa en la que hizo un balance de su visita, un periodista le preguntó a Aylwin sobre si creía que las diferencias políticas entre Chile y China podían significar un obstáculo, a lo cual el Presidente respondió que "yo creo que las diferencias políticas no debieran ser obstáculo a las relaciones entre los países".
"En principio, la tesis chilena es que nosotros mantenemos relaciones más allá de las diferencias políticas que puedan existir con los gobiernos de los distintos países, y China en eso sostiene permanentemente esa misma tesis", añadió, marcando una línea que luego fue seguida por sus sucesores.
"Creo que las diferencias políticas no debieran ser obstáculo a las relaciones entre los países".
Patricio Aylwin, ex Presidente
Asimismo, consultado sobre su visión de las violaciones a los DD.HH. en China, indicó que "Mire, usted comprende que a un jefe de Estado extranjero que viene al país no le corresponde hacer un papel de inquisidor y venir a hacer una investigación sobre esas materias,
ni en una visita de tres días está en situación de formarse una
opinión sobre ese particular".
"Yo no he venido aquí en calidad de representante de ninguna organización de derechos humanos a verificar ningún problema de esta especie, ni he recibido tampoco denuncias sobre esa materia", subrayó, dando por zanjado el tema.
No obstante, de acuerdo a minutas de Presidencia revisadas por Emol y que han sido publicadas por el Archivo Patricio Aylwin, se consignó que el tema era de interés para nuestro país. De hecho, en una de ellas, se señala que en la cita con Yang, "sería del caso intercambiar opiniones respecto al papel que deben jugar los organismos internacionales en esta materia".
Asimismo, se destaca que entre los temas de conversación, el primero debe ser el de los derechos humanos. "Chile y China tienen posiciones distintas en esta materia. Mientras que nuestro país considera que la defensa y promoción de los derechos fundamentales del hombre tienen un valor supranacional. China postula que tales derechos corresponden a materias de orden interno de cada país, limitando la competencia de los organismos internacionales", advierten en el documento.
Frei, Lagos, Bachelet y Piñera
El 24 de Noviembre de 1995 se produjo la segunda visita de un Presidente de Chile a China. En esa ocasión, Eduardo Frei, respondió sobre las evidentes diferencias políticas entre ambos países que "uno de los fundamentos de las relaciones internacionales es el respeto a la libre determinación de los pueblos y la forma de gobierno que se dan (...) cada país es dueño de establecer el gobierno que determine''.
No obstante, Frei hizo un pequeño gesto y declaró desde suelo chino que "evidentemente, todos estamos conscientes de que hay que respetar los valores democráticos, la justicia y el respeto a los derechos humanos, que son valores universales''.
"Estamos conscientes de que hay que respetar los valores democráticos, la justicia y el respeto a los derechos humanos".
Eduardo Frei, ex Presidente
Seis años pasaron para que un líder chileno regresara a China. El 23 de Octubre de 2001,
Ricardo Lagos dio un punto de prensa en plena Plaza de Tiananmen, la misma que en 1989 se convirtió para los chinos disidentes en el símbolo de los atropellos a los derechos humanos del régimen comunista.
En ese escenario, Lagos aseguró que el tema de los DD.HH. no fue tocado en la cita con su par Jiang Zemin. "No los hemos abordado por una razón. Porque China ha aceptado algo que le hemos planteado y que me parece muy importante y es que venga una comisión chilena para analizar el tema de los derechos humanos".
Según el Mandatario, el gobierno chino ha sido "infinitamente más abierto y han aceptado misiones nuestras en el Tíbet", como también discutir el tema con representantes chilenos. Además, justificó su posición diciendo que mientras otras naciones no permiten que observadores ingresen a su territorio, China sí ha manifestado una apertura en este tema.
El 14 de abril de 2008 fue la primera visita de Estado de Michelle Bachelet. Su presencia en Beijing fue antecedida por los cuestionamientos internacionales a China por la represión de las protestas pro independentistas en Tibet. No obstante, la Presidenta reiteró su postura de respeto a la integridad territorial de este país.
"Le propuse al Presidente chino establecer un diálogo franco y respetuoso en materia de DD.HH. y de reformas políticas".
Sebastián Piñera, Presidente
"La Presidenta Bachelet reiteró que
Chile se adhiere firmemente a la política de una sola China, respeta la soberanía e integridad territorial de la República Popular China, reconoce que Taiwán y Tíbet forman parte de China. La parte china expresó su aprecio a esta posición chilena", rezó la declaración conjunta firmada entre ambos países.
Dos años después, fue el turno de Sebastián Piñera, quien aseguró que sí dialogó sobre DD.HH. con su par Hu Jintao. "Le propuse al Presidente chino establecer un diálogo franco y respetuoso en materia de derechos humanos y de reformas políticas", dijo, reactivando las tratativas iniciadas en 1997 bajo el gobierno de Frei.
En ese contexto, Piñera recalcó que "el Presidente estuvo de acuerdo y decidimos canalizarlo a través de las oficinas de China y Chile en Naciones Unidas, tanto en Ginebra como en Nueva York".
En tanto, el 10 de noviembre de 2014, ya en su segundo gobierno, Bachelet hizo un nuevo gesto a China y evitó hacer críticas por DD.HH., aunque reconoció que el asunto fue abordado "en el sentido amplio de la palabra (...) es parte de las relaciones tanto a nivel de Apec y la discusión entre los líderes muchas veces".
Asimismo, recordó que "de hecho, el programa del presidente Xi Jinping menciona específicamente, y es parte del compromiso de este Gobierno, promover las garantías de DD.HH., así que como digo, esto es parte de lo que siempre los países conversan entre ellos y se ven las experiencias de cada país".
