El diputado Raúl Soto tuvo una acalorada discusión con el jefe de bancada DC, Gabriel Ascencio.
Emol
VALPARAÍSO.- Los dimes y diretes en la Democracia Cristiana no solo quedaron en evidencia al interior de la Sala a causa de la votación dividida que realizaron hoy sobre la reforma previsional impulsada por el Gobierno, que finalmente logró avanzar en su trámite legislativo gracias al apoyo de parte de la falange y el Partido Radical.
En el Hemiciclo el diputado Raúl Soto se enfrentó acaloradamente a su jefe de bancada, Gabriel Ascencio. El primero con un billete de $10.000 en la mano emplazó a sus camaradas a "dar la cara" ante los pensionados y explicar que ese monto es el aumento en las jubilaciones que considera el proyecto. Mientras que el segundo, lo cuestionó por criticar el monto "desde la comodidad del cargo y nuestras billeteras" resaltando que como parlamentarios reciben más de $6 millones mensuales líquido como dieta.
Es así que el debate continuó posterior a la votación y ante la prensa, pues el diputado Gabriel Silber aseguró que pese a que respetan la "diversidad" interna, Soto "no tiene ningún abolengo particular al resto de los parlamentarios para suponer una altura moral respecto del resto de los parlamentarios demócratacristianos que son la gran mayoría y que hoy día se expresaron con sus votos en la Sala".
Ante esto el aludido diputado, que además preside la comisión de Trabajo que ya había rechazado el proyecto y que ahora deberá discutirlo en particular, aseguró que lo que ocurrió en la votación fue la expresión de las diversas opiniones que existen en el partido y además es una muestra de la diferencia generacional que hay entre los parlamentarios de la colectividad.
"Hay antiguas generaciones en política y hay nuevas generaciones que estamos empezando en este mundo. Cuando se ve una foto de quienes aplaudíamos todos por su valiente lucha contra la dictadura y hoy día son (los mismos) aplaudidos de pie por la derecha por validar un sistema injusto como este, creo que esa es la foto del momento y tenemos que analizarla", sostuvo Soto.
En ese sentido y haciéndose cargo del quiebre que acusaron desde el Partido Comunista y el Frente Amplio con la DC, el falangista emplazó a la oposición a "transparentar sus diferencias y ver si es posible o no recomponer relaciones. Evidentemente hoy estamos en un mal pie".
"Acuerdo ficticio"
Respecto a la discusión del fondo del proyecto y su votación, Soto aseguró que es una mala iniciativa y que la DC votó a favor -excepto él y su par Víctor Torres- en base a un "acuerdo ficticio que es solamente un espejismo para justificar" el respaldo, pues a su juicio, el Gobierno no entregó una nueva propuesta a lo ya presentado ante la mesa técnica de la oposición.
En ese sentido instó a la centroizquierda a mantener la unidad al interior de la comisión de Trabajo y para eso volverá a convocar a técnicos y políticos del sector para trabajar en el proyecto de manera conjunta.
"Esto recién comienza, hemos perdido la primera batalla, pero sin duda alguna que vamos a ganar la guerra y esa guerra significa que de aquí en adelante el Presidente (Piñera) tiene que entender que si queremos construir cambios previsionales sobre roca, tiene que ser sobre la base de un nuevo pacto político social lo más amplio y transversal posible (...). Hay que recordarle al Ejecutivo una vez más que una reforma previsional no se construye pirquineando votos en la Sala, se construye trabajando juntos", puntualizó el diputado.
"Respirador artificial"
Por su parte Silber defendió la postura de quienes votaron a favor y apuntó al Gobierno diciendo que "no tiene nada que celebrar" ya que según él la falange solo aprobó la idea de legislar para no darle "un portazo al tema de pensiones".
"De verdad nosotros consideramos que fumaríamos opio si es que efectivamente entendemos que este debate solamente, en una democracia, se da desde la calle. Nosotros vamos a tomar todas las ideas de la mesa técnica y como parlamentarios las vamos a defender en el Congreso con nuestros votos. Ahora sí llegó la idea de legislar y la hora de votar, el debate en serio se va a dar en la comisión de Trabajo", justificó el DC.
Y agregó que "simplemente hemos mantenido con respirador artificial y en la UTI la subsistencia y viabilidad de esta reforma".