El Mercurio/Imagen referencial
SANTIAGO.- Haciéndose pasar por clientes. Así operaría la nueva
"brigada encubierta" de adolescentes que busca implementar Las Condes para fiscalizar si en la comuna se cumple la
prohibición de vender alcohol a menores de edad. La idea es que los jóvenes intenten comprar en distintos locales, para ver en cuáles no se respeta la ley. En ese sentido, el
alcalde Joaquín Lavín aseguró que lo anterior permitirá fiscalizar rápidamente a los negocios y cursarles una multa.