Teodoro Ribera, el nuevo ministro de Relaciones Exteriores.
Agencia Uno
SANTIAGO.- El momento actual que atraviesan las relaciones internacionales, marcadas por el conflicto económico entr
e Estados Unidos y
China, anticipan un "desafiante" reto para
Teodoro Ribera como nuevo ministro de Relaciones Exteriores de Chile, según él mismo reconoció.
Tras haber sido anunciado como el reemplazante de Roberto Ampuero en la Cancillería, el ex diputado (1990-1998) trazó sus desafíos en la cartera y reconoció el complicado panorama que deberá enfrentar.
"Tenemos una agenda internacional interesante, pero desafiante, donde dos grandes potencias mundiales debaten sobre su hegemonía mundial, y un pequeño como el nuestro debe saber bailar bien", dijo Ribera.
A su juicio, "estamos en un momento especial en relaciones internacionales, donde hay una confrontación económica cada vez más creciente. Pero nosotros también esperamos que eso no nos afecte más de lo que necesariamente nos tiene que afectar en materia económica".
El recién asumido canciller agregó que "también tenemos un entorno latinoamericano complejo, donde se violan los derechos humanos, donde la migración venezolana es un problema que nos afecta a todos los que creemos en los derechos humanos y en la estabilidad".
Ribera señaló además que otro de sus principales objetivos será implementar la nueva ley del Ministerio de Relaciones Exteriores, como también "seguir defendiendo los intereses de Chile y que los derechos de los chilenos estén debidamente representados cuando negociemos tratados internacionales".
"El hecho de que Chile sea pequeño pero con una trascendencia internacional tremenda, es un valor que tenemos que cultivar y acrecentar", puntualizó.
Reunión con Ampuero y renuncia anterior
Antes de empezar a trabajar, Ribera anunció que primero se reunirá con el ahora ex ministro Roberto Ampuero, quien es su amigo y a quien conoció cuando ambos vivían en Alemania durante su juventud.
"Tengo presente reunirme con él para poder ver la agenda de los trabajos pendientes, de lo realizado en el ministerio. Me voy a reunir también con la subsecretaria (Carolina) Valdivia para en definitiva interiorizarme de lo que estamos avanzando, y luego de eso sin lugar a dudas les daré ideas más precisas de los énfasis que tendremos a futuro".
Por otro lado, el también ex abogado del TC se refirió a la polémica que debió enfrentar durante la primera Administración de Sebastián Piñera, cuando renunció al ministerio de Justicia. En dicha ocasión se le criticó por haber contratado como asesor de la cartera a Luis Eugenio Díaz, ex presidente de la Comisión Nacional de Acreditación, a quien se le acusa de no haberse inhabilitado para acreditar a la Universidad Autónoma, donde Ribera ha sido rector en dos ocasiones.
"Creo que una persona que no aprende del pasado es una persona que nunca va a mirar con seguridad el futuro. Los acontecimientos que tuvieron lugar hace algunos años impedían que yo como ministro de Justicia me pudiera defender, producían también un daño al Gobierno y lo que corresponde en esos casos es que uno se retire para hacer la defensa y luego terminar constatando de que las imputaciones que se realizaron, ninguna de ellas tuvo asidero", aseguró.
Y agregó que "soy una persona que aprendo del pasado, creo que hay que tener una cuota de humildad frente a los desafíos importantes. Creo que el gran desafío que tiene en todo cargo es asesorarse y buscarse asesorar con personas que saben igual o más que uno".
