SANTIAGO.- La mañana del 9 de abril pasado se informaba la sustracción de dos fusiles a dos conscriptos del
Regimiento Chacabuco de Concepción. Las alarmas se encendían en el Ejército, pero 24 horas después la historia sufría un vuelco.
Según se pudo establecer, ambos entregaron relatos que llevaron a los investigadores a dudar del supuesto robo. La inconsistencia fue tal que los dos terminaron siendo detenidos por su presunta complicidad en el hecho.
El hecho dejó dudas respecto a si situaciones relacionadas al extravío o robo de armas al interior de la institución castrense constituyen acontecimientos aislados, razón por la que el Ejército, vía transparencia, entregó a Emol información referente a los últimos nueve años.
Así, desde el 2010 a la fecha, se han registrado 33 situaciones correspondientes a pérdida de armamento en el organismo uniformado, como sables, machetes, armas de puño, municiones y "armamento menor". En nueve de aquellos extravíos, el material ha sido recuperado en su totalidad.
Además, de los casos registrados, al menos 17 fueron o están siendo investigados por la Fiscalía Militar, y se ha contabilizado a un total de 49 personas involucradas en estos hechos en dicho período.
2016fue el año en que más se anotaron extravíos de armamento en esta rama de las Fuerzas Armadas.
Los castigos, de acuerdo a lo informado por el Ejército, han ido desde arrestos que se han extendido desde uno a 15 días hasta sanciones administrativas y pecuniarias, pasando también por reprensiones.
Por último, el año en que más se anotaron extravíos de armamento en esta rama de las Fuerzas Armadas fue en 2016 con ocho casos; seguido del 2011 con seis casos, y tercero en 2017, cuando se registrando cuatro desapariciones.
Mientras que en lo que va de 2019 se ha dado cuenta de tres pérdidas, entre ellas, lo sucedido en el Regimiento de Chacabuco.