SANTIAGO.- A fines de junio, más de 400 venezolanos se dirigieron al paso fronterizo Chacalluta, ubicado entre Tacna -al sur de Perú- y la ciudad nortina de Arica, para poder ingresar a Chile. Sin embargo, al no contar con los documentos necesarios no pudieron hacerlo y se quedaron en el lugar, durmiendo a la intemperie, a la espera de un cambio en su situación.
Esto llevó a que los migrantes fueran trasladados por las autoridades a la sede consular de Chile en Tacna, donde podrían solicitar sus visas de manera más ordenada.
Los extranjeros están a la espera de obtener un visado consular de turismo, nuevo requisito del gobierno chileno desde el pasado 22 de junio, o bien, la visa de responsabilidad democrática. A esto se suma la necesidad de obtener un pasaporte venezolano, documento cuyo precio es, dicen, prohibitivo para la mayoría de los ciudadanos de ese país.
Pero esa preocupación en el paso de Chacalluta, denunciada por organismos como el Servicio Jesuita de Migrantes, se trasladó en parte al frontis del consulado chileno en Tacna: el fin de semana, una embarazada sufrió un aborto espontáneo a causa del estrés por conseguir los papeles necesarios para ingresar a Chile.
Son cientos de familias las que han instalado carpas a las afueras del consulado, en la primera cuadra de la calle Presbítero Andía, para pasar días y noches a la espera de obtener sus visas, situación que llevó a las autoridades peruanas a cerrar el tránsito vehicular.
Familias con hijos, embarazadas y quienes necesiten reunificación tienen prioridad en el consulado, ya que las condiciones que se viven en el improvisado campamento son desfavorables. Sin embargo, desde la sede consular explicaron que no pueden otorgar asistencia médica a ciudadanos que no sean chilenos si están en territorio extranjero.
"Han ingresado al país más de 1.600 personas por vía Chachalluta, desde el consulado de Tacna, con todos los visados al día. (...) Se está haciendo un esfuerzo muy grande"
Mijail Bonito, asesor de política migratoria Ministerio del Interior
"Han ingresado al país más de 1.600 personas por vía Chachalluta, desde el consulado de Tacna, con todos los visados al día. Eso supone que es tres veces la cantidad de personas que en algún minuto hubo en el complejo de Chacalluta en tan sólo tres semanas. Se está haciendo un esfuerzo muy grande", dijo el asesor de política migratoria del Ministerio del Interior, Mijail Bonito, en entrevista con 24 horas, además de recomendar adelantar trámites por internet antes de ir directamente al consulado.
El consulado
El edificio se encuentra ubicado en la esquina de las calles Presbítero Andía y la Avenida Saucini, a sólo cinco cuadras del Paseo Cívico de Tacna y el Arco Parabólico, construcción simbólica de la ciudad peruana ubicada en el centro de la urbe.
Desde el exterior, se puede visibilizar una casona rojiza en medio de un pintoresco jardín. En la entrada, ubicada en calle Presbítero Andía, una reja blanca sostiene una placa del mismo color: "República de Chile - Consulado General", dice, mientras una bandera chilena se alza a su costado.
La casona tiene dos pisos que, según el cónsul chileno Gustavo Díaz, corresponden a 900 metros cuadrados construidos. Su origen data de 1865, y es ocupada por el gobierno chileno desde 1904. Debido a su antigüedad, el primer piso de la casona está hecho de adobe, mientras que el segundo está construido de quincha a causa de las reconstrucciones ocasionadas por diversos sismos.
A su alrededor se pueden encontrar la sede del Gobierno Regional de Tacna, el Poder Judicial, la Municipalidad Provincial tacneña y la Estación Ferroviaria, además de estar rodeado de distintos tipos de hospedajes y restaurantes.
¿Quiénes conforman el consulado?
Desde 2015, el cónsul chileno encargado de las relaciones exteriores en Tacna es Gustavo Alberto Díaz Hidalgo, ingeniero comercial de la Universidad de Chile con mención en Economía. Trabaja en el Ministerio de Relaciones Exteriores desde 1985, y tiene el grado de consejero del Servicio Exterior.
En su tarea, lo acompañan en el país vecino otros siete funcionarios, los cuales desempeñan labores que van desde asuntos de extranjería, contabilidad o administración, hasta la misma seguridad del consulado y el transporte de los funcionarios.
Desde las 8 de la mañana hasta las 13:00 horas, la oficina atiende al público de lunes a viernes, y se mantiene cerrada los fines de semana. Pero la urgencia de acelerar los procesos para los venezolanos, ha hecho que atiendan también los sábados en el mismo horario.
A causa de la situación de emergencia que se vive por la gran cantidad de venezolanos que acuden para obtener el visado que permite su ingreso a Chile, la Dirección General Consular de Chile reforzó el consulado con cuatro funcionarios de Cancillería y dos de la PDI, para así tramitar con más rapidez las solicitudes de visa.