La ministra vocera de Gobierno, Cecilia Pérez.
Aton Chile.
SANTIAGO.- Luego que la Compañía de Jesús entregara un informe de 22 víctimas de abusos sexuales cometidos por el fallecido sacerdote jesuita Renato Poblete, desde el Gobierno manifestaron su "profunda indignación" por lo ocurrido, a la vez que solidarizaron con los afectados y sus familias.
"Los antecedentes que hemos conocido con respecto a la investigación que hiciera la Compañía de Jesús, realmente es indignante y también profundamente doloroso. Fueron 48 años de abuso, 48 años de profundo dolor a las víctimas de estos abusos y también a sus familiares", afirmó la ministra vocera de Gobierno, Cecilia Pérez.
En ese sentido, Pérez indicó que "creemos que el Ministerio Público tiene que investigar, que la Compañía de Jesús tiene que poner los antecedentes a disposición para poder no solamente indagar profundamente en la verdad, sino que también hacer justicia, sobre todo de aquellos que pudieron haber tenido alguna participación en calidad de cómplices o encubridores de hechos tan condenables y que lamentamos profundamente como Gobierno".
Asimismo, la ministro afirmó que "solidarizamos con las víctimas, solidarizamos con el profundo dolor de sus familiares, porque claramente han sido décadas en que no se sintieron escuchados. Y hoy la propia Compañía de Jesús ha hecho un reconocimiento de perdón institucional y también de asumir una responsabilidad institucional por no haber estado atenta a percibir y a recibir estas denuncias como lo habrían esperado las víctimas y también sus familiares".
"Valoramos el perdón, valoramos la responsabilidad institucional, pero creemos que es hora de poner estos antecedentes ante el Ministerio Público para que la justicia llegue y pueda de alguna forma resarcir estos abusos, este dolor y este daño profundo que se ha causado a las víctimas y a sus familiares", recalcó.
Pérez enfatizó que como Gobierno, "hay indignación, una profunda indignación y solamente poder acompañar al dolor, en esta verdad que hoy se está sabiendo a las víctimas, a tantas mujeres y también a sus familiares, porque sin duda han sido décadas de incomprensión, de no haber sentido una mano que las acogía, un oído que las escuchara, que es lo que uno espera sin duda de personas que son muchas veces aquellos que te acompañan en la fe y también en aquellos inconvenientes que tú tienes día a día".
Consultada respecto a la opinión del Presidente Sebastián Piñera, la ministra dijo que "el Presidente comparte la profunda indignación y sobre todo en estos minutos tan importantes la compañía que le hacemos llegar a las víctimas y sus familiares".
La portavoz de La Moneda coincidió en que en "un Chile que pide que las víctimas tengan voz y que también tengan justicia, las otras congregaciones debiesen seguir el mismo camino".