SANTIAGO.- Durante la tarde de este lunes, la
congregación de los Sagrados Corazones en Chile (SS.CC.) confirmó que inició una "investigación previa canónica" en contra del
sacerdote Gerardo Joannon, luego de que se conociera una denuncia en su contra por abuso sexual.
A través de un comunicado, la congregación manifestó que "hoy hemos tomado nota de la denuncia de Carolina Marín, respecto de hechos que involucran a los sacerdotes Gerardo Joannon, Juan Andrés Peretiatkowicz y Jorge Prieto, decretándose de inmediato una Investigación Previa Canónica con el objeto de avanzar a esclarecer en lo que nos compete estos dolorosos hechos".
En esa línea, desde los SS.CC. hicieron un llamado a conformar una comisión nacional para recibir denuncias, considerando "las innumerables denuncias de abuso sexual por parte de sacerdotes y personas ligadas a la Iglesia Católica".
"Expresamos a los denunciantes nuestro agradecimiento por su valentía, solidarizamos con su dolor, y al mismo tiempo, compartimos los diversos sentimientos que estas situaciones causan a los familiares y amigos de estos religiosos, así como a los integrantes de nuestra Congregación"
Congregación de los Sagrados Corazones en Chile
La denuncia en contra de Joannon se conoció luego de que Marín, de 46 años, acusara al sacerdote de abuso sexual, episodios que habrían comenzado cuando ella tenía ocho años, que se prolongaron hasta que cumplió 12 y que luego habrían involucrado también a Juan Andrés Peretiatkowicz y Jorge Prieto.
La mujer explicó en entrevista con radio Biobío que los abusos comenzaron cuando cursaba tercero básico en el colegio de los Sagrados Corazones de la comuna de Providencia, en el momento en que Joannon se convirtió en su guía espiritual en el camino a la primera comunión.
En tanto, desde la congregación también confirmaron que recibieron otras denuncias en contra de dos sacerdotes que se encuentran fallecidos: Jorge Prieto Vial, hechos que habrían ocurrido a inicios de los años 60 en Santiago, y Enrique Moreno Laval, hechos que habrían acontecido a fines de los 70 y principios de los 80 en la ciudad de Talcahuano.
Con lo anterior, detallaron que "hemos tomado estas denuncias como punto de partida de las investigaciones que están en curso. Ellas tienen por objeto determinar con la mayor precisión posible, la verosimilitud de los testimonios de quienes concurran a denunciar".
En ese sentido, anunciaron que los antecedentes fueron remitidos al Ministerio Público a "a las instancias respectivas en Roma". En tanto, solidarizaron "con el dolor" de los denunciantes y valoraron su "valentía".
"Expresamos a los denunciantes nuestro agradecimiento por su valentía, solidarizamos con su dolor, y al mismo tiempo, compartimos los diversos sentimientos que estas situaciones causan a los familiares y amigos de estos religiosos, así como a los integrantes de nuestra Congregación", expresaron.
