"Yo espero que, cuando las cámaras se apaguen, la atención que el Estado de Chile ha entregado se mantenga, y que tengamos en el 2020 en el Presupuesto de la Nación una glosa Valparaíso, que nos entregue los recursos que no ha tenido la ciudad por más de 25 o 30 años para poder hacer la pega que tenemos que hacer, que es recuperar la ciudad".
Fueron las palabras que emitió el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp (FA), cuando efectivamente todas las cámaras estaban apuntando a la ciudad porteña: tres días antes, una antigua casona se había derrumbado sobre la escalera Pasteur, en cerro Bellavista, dejando seis personas fallecidas.
A raíz de la emergencia, el ministro de Vivienda y Urbanismo, Cristián Monckeberg, comprometió recursos para derribar las casas con orden pendiente de demolición, que no han podido ser ejecutadas por falta de recursos. Pero para solucionar la situación, aseguró el alcalde, se necesita más financiamiento.
"Valparaíso es una ciudad Patrimonio de la Humanidad y merece, por el aporte que ha hecho en la historia al Estado de Chile, de una vez por todas un tratamiento especial", profundizó este lunes en El Mercurio de Valparaíso. "A mí me preocupa muchísimo que a 100 kilómetros de La Moneda pasen este tipo de cosas; esta es la ciudad que hace conocido y que le va a dar un valor a Chile en el mundo", añadió.
Por eso es que el jefe comunal solicita una glosa para Valparaíso, que se incluya en el Presupuesto de la Nación para 2020 y que considere US$1.000 millones para intervenir las 4.065 casas que, según el Censo 2017, están en mal estado y requieren trabajo. De acuerdo a los datos que maneja el alcalde, el total de viviendas con requerimientos es de 9.024 en la comuna.
"No es sólo el sitio declarado Patrimonio de la Humanidad: Valparaíso entero es una ciudad patrimonial y vuelvo a señalar que en sus paredes expresa años de abandono", asegura el alcalde. "Expresa la estrategia económica fallida de un Estado que dejó a su suerte la ciudad".
Más allá de la glosa: El anhelo de la ley
Lo que contiene la solicitud del alcalde es una demanda que el senador Francisco Chahuán (RN) ya había expresado al Gobierno también de Sebastián Piñera en 2012. "Hemos pedido una Ley Valparaíso, que dice relación con una ley que se haga cargo de la declaratoria de Patrimonio de la Humanidad, y eso debiera materializarse en una glosa presupuestaria", asegura a Emol el parlamentario. En dicha oportunidad, pidió la creación de una glosa patrimonial para la ciudad.
"Todo esto se desencadena en función de la depresión económica que está viviendo la región, una de las que tiene mayores cifras de desempleo (...) La gente, al no tener recursos, no puede mantener sus viviendas"
Diego del Barrio, académico U. de Valparaíso
"Eso permitió la adquisición de inmuebles patrimoniales y creemos, sin lugar a dudas, que hoy se requiere esta ley, donde el Estado se pueda hacer cargo de la declaratoria de Patrimonio de la Humanidad que hoy día tiene Valparaíso", asegura el parlamentario. "Lo hemos venido pidiendo persistentemente", añade.
Con respecto a los montos, Chahuán defiende que "hay que lograr primero que se establezca una glosa inicial". "Hay que ir generando una capacidad del Estado de comprometerse, tal como ocurrió en su momento con el préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que fue clave", explica.
A lo que hace mención el senador es al Programa de Recuperación y Desarrollo Urbano de Valparaíso, que surgió en 2006 fruto de un contrato de préstamo entre el Gobierno y el BID para "intervenir de manera integral en el territorio urbano considerado área patrimonial de Valparaíso".
La entidad aportó US$25 millones para la recuperación de 20 hectáreas de borde costero en una transacción firmada por Ricardo Lagos y financiado por el Estado en un préstamos por diez años. "Acá se requiere reeditar la fórmula", apunta Chahuán.
El "problema de fondo"
Desde el mundo académico concuerdan con la necesidad de solucionar los problemas inmediatos a través de la inyección de recursos, pero hacen una advertencia: "Aunque son bien recibidos, no atacan el fondo del problema ni lo van a solucionar", asegura el director de la Escuela de Administración Pública de la U. de Valparaíso, Diego del Barrio.
"Todo esto se desencadena en función de la depresión económica que está viviendo la región y en especial la ciudad de Valparaíso, una de las regiones que tiene mayores cifras de desempleo y donde abundan los empleos muy precarios y el comercio ambulante. Todo eso va redundando en que la gente, al no tener recursos, no puede mantener sus viviendas", explica a Emol.
Un ejemplo de esta realidad es, según el académico, el clásico estilo de "autoconstrucción" de las casas de la ciudad. "El alcalde ha dicho muchas veces que el porteño construye sus casas con lo que tiene en el momento y eso le da un carácter pintoresco a Valparaíso, que muchas veces es atractivo para el turista, pero para quienes habitan esos lugares no son condiciones amigables ni de buena habitabilidad", comenta. "Eso va escondiendo la pobreza que hay en Valparaíso".
Por eso, a su juicio, la solución no pasa únicamente por aprobar una glosa presupuestaria que atienda los problemas más urgentes, porque ese financiamiento no solucionaría lo que está en las raíces del funcionamiento de la ciudad y que podría terminar en que, en veinte o treinta años más, Valparaíso vuelva a enfrentar el mismo escenario de emergencia.
"Lo que se debe hacer es fortalecer todo el sistema económico y social que tiene Valparaíso. Con estos ingresos podemos mejorar algunos muros de contención y derrumbar las viviendas que presentan peligro para los ciudadanos, pero más allá de eso no van a solucionar el tema estructural que está afectando en este momento a Valparaíso", agrega Del Barrio.
Se trata de una necesidad que, según el académico, coincide con un momento especial: la elección de gobernadores regionales. "Tiene también que ver con políticas regionales y con darle mayor autonomía a estos gobiernos. Que puedan disponer libremente de los recursos, que ellos los puedan designar y no ser meramente quienes los transfieran", concluye.