SANTIAGO.- El ministro de Justicia, Hernán Larraín, dejó entrever un posible cambio en la situación del Galvarino Apablaza, ex miembro del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR) y quien se encuentra viviendo desde hace más de una década en Argentina.
Ello, a raíz de la extradición de Mauricio Hernández Norambuena que se acordó en tiempo récord con Brasil por el crimen del senador Jaime Guzmán y el secuestro de Cristián Edwards, y cuyo caso enfrentó ayer las primeras definiciones.
El ministro en visita para causas de DD.HH. Mario Carroza dictó el cumplimiento de dos penas de 15 años, abonando poco más de tres años a la sanción.
"Quizás esto pueda ser una señal para Argentina", partió señalando Larraín en conversación con Radio Infinita.
Y es que Apablaza, o también conocido como "comandante Salvador", está procesado en Chile como líder del FPMR al momento del asesinato del parlamentario. Actualmente se encuentra a la espera que la justicia argentina revise la apelación que presentó su defensa a la decisión del gobierno del Presidente Mauricio Macri de quitarle el estatus de refugiado que antes le había dado la administración de Cristina Fernández.
En esa línea, Larraín añadió: "La Corte Suprema argentina autorizó la extradición de Galvarino Apablaza ante la solicitud que se hizo en su momento por Chile, pero en ese minuto él tuvo la calidad de refugiado que impidió que se aplicara esa condición".
Y concluyó: "Esa calidad de refugiado le fue quitada hace dos años atrás y está en discusión. Si perdiera esa calidad definitiva entonces quizás podría proceder la extradición".
