El requerimiento de extradición que la justicia de Estados Unidos presentó contra el empresario chileno Carlos Cardoen continúa avanzando. Tras abrirse el término probatorio, su abogada defensora, Joanna Heskia, entregó ante el ministro instructor de la causa designado por la Corte Suprema, Carlos Aránguiz, 14 documentos para establecer que las autoridades norteamericanas conocían las actividades que desarrollaba Cardoen, y que sabían que se dedicaba a la fabricación de bombas de racimo con circonio. Entre los documentos se encuentran declaraciones juradas, publicaciones de prensa, folletos y patentes de inscripción. Asimismo, Heskia plantea que los supuestos delitos que le imputan al empresario estarían prescritos.