Durante la jornada de este sábado, la Fiscalía de Arica realizó la formalización de Marcos Alvarado O., hombre imputado por el delito de femicidio en contra de su ex pareja, una mujer de 49 años, efectuado en el domicilio de la víctima el pasado 10 de septiembre, hecho por el cual quedó en prisión preventiva.
Si bien desde el pasado 13 de septiembre se contaba con una orden de detención, la resolución se llevó a cabo luego de que el día de ayer el hombre fuera dado de alta del hospital local, después de haber estado en estado de extrema gravedad al autoinfringirse diversas lesiones con un arma blanca tras realizar el delito.
Investigación
Según las investigaciones de la Brigada de Homicidios de la PDI, a cargo del fiscal Elías Gutiérrez, el imputado y su expareja habrían tenido una relación hasta abril de este año. Pero el 10 de este mes, luego de que la víctima le negara el ingreso al domicilio al imputado, el sujeto entró por un ventanal, ante lo cual se generó una discusión.
Lo anterior, según informó el persecutor en la audiencia, estaría corroborado con testigos que presenciaron la llegada del sujeto al domicilio y la posterior discusión dentro del hogar.
También, la actual pareja de la víctima declaró que la mujer lo llamó a su teléfono para alertar la situación, y en un segundo llamado la mujer le confirmó que el imputado ya había ingresado a la vivienda, tras lo cual se cortó la comunicación.
El hombre le propició más de una decena de heridas corto penetrantes a la mujer con un arma blanca, provocando la muerte en el lugar de la víctima. Después, el imputado se propició lesiones que lo dejaron en riesgo vital.
Si bien la defensa argumentó que el hombre presentaba inestabilidad mental, ante lo cual el fiscal Gutiérrez manifestó que "nosotros entendemos que, por ahora, no hay ningún antecedente que justifique que él tenga algún tipo de alteración mental que lo pueda eximir de responsabilidad".
En la audiencia, el imputado quedó en prisión preventiva acusado de ser un peligro para la seguridad de la sociedad, y se determinaron 90 días para la investigación del caso. Según los antecedentes, el hombre arriesgaría como pena máxima de presidio perpetuo calificado, "es uno de los delitos más graves de nuestra legislación", señaló el fiscal.