Las autoridades que han pedido "perdón" o realizado un "mea culpa" en medio de la crisis

SANTIAGO.- Por no haberse dado cuenta antes, por no haber hecho las cosas con más premura o por decir frases desafortunadas que contribuyeron al malestar social que detonó la ola de protestas en el país, distintas autoridades, principalmente del Gobierno, han pedido "perdón" o realizado un "mea culpa" ante la ciudadanía en los últimos días.

El primero en hacerlo públicamente fue el Presidente Sebastián Piñera, cuando se cumplía el cuarto día de protestas. "Es verdad que los problemas se acumulaban desde hace muchas décadas y que los distintos gobiernos no fueron ni fuimos capaces de reconocer esta situación en toda su magnitud. Reconozco y pido perdón por esta falta de visión", afirmó el Mandatario la noche del lunes, en cadena nacional, justo antes de anunciar un paquete de medidas de corte social para intentar responder a la población.

Sus palabras tuvieron eco inmediato en varias autoridades de Gobierno. A primera hora del martes, la intendenta Metropolitana, Karla Rubilar, afirmó a Canal 24 Horas que "el Presidente dio un paso gigantesco; hay que valorar la humildad con la que el Presidente se enfrenta ayer por algo que no es solamente de nuestro Gobierno". Y agregó: "Yo creo que muchos de nosotros debemos pedir perdón, yo también lo pido, fui parlamentaria por doce años, pido perdón por todo lo que no haya hecho o haya dejado de hacer y que podría haber hecho; yo creo que somos muchos los que tenemos que pedir perdón".

En la misma línea, el ministro de Desarrollo Social y Familia, Sebastián Sichel, comentó que "ayer pasó algo muy bonito para Chile, que un Presidente de la República dice perdón; y yo creo que ese perdón nos llega a todos, a todos los que hemos sido parte muchas veces de la élite, de los privilegios y no hemos tenido la capacidad de ver el sacrificio que las personas hacen todos los días para sacar adelante sus vidas y hemos visto esto desde los libros, desde lo técnico".

El miércoles fue el turno del ministro de Energía, Juan Carlos Jobet, quien al ser consultado en T13 Radio por qué hubo que esperar un estallido social para tomar medidas, dijo que: "Por eso pedimos disculpas; yo creo que a veces uno toma conciencia de que lo posible es más de lo que uno creía cuando hay un campanazo como el de los últimos días. Chile ha avanzado una enormidad en las últimas décadas, pero hay mucha gente a la que ese desarrollo no le llegó o que sentía que no le llegó todo lo rápido que ellos esperaban; y yo creo que estos días han sido un campanazo de alerta para que redoblemos ese sentido de urgencia". También dijo, a radio Pauta, que "hoy día con humildad (hacemos) un reconocimiento de que pudimos haber hecho las cosas con más premura. Esa es la verdad".

El ministro de Trabajo, Nicolás Monckeberg, hizo lo propio, en radio Duna, donde señaló que "el llamado que yo hago como ministro del Trabajo, y me lo auto hago y hago autocrítica y hago mea culpa, porque me carga ser aquí el que apunta con el dedo, es a que quizás nunca más centremos los debates en los sueldos mínimos y centremos el debate, nuestros anhelos y nuestros objetivos, en los sueldos máximos".

Pero también hubo un mea desde la oposición. El senador Felipe Harboe (PPD) sostuvo, durante una exposición en la Cámara Alta, que "si en lo que a mí compete hay que pedir disculpas, las pido humildemente, por no haber hecho todo lo posible para mejorar las condiciones de mi país". Junto a eso, pidió "la generosidad de todos aquéllos que integran este Senado de la República, que han sido elegidos por los ciudadanos, para avanzar en una legislación rápida y directa para mejorar las condiciones de vida de las personas".

Otro ministro que pidió perdón fue el de Economía, Juan Andrés Fontaine, y lo hizo por su polémica declaración tras el alza del Metro. "Quien madrugue, puede ser ayudado a través de una tarifa más baja", dijo en esa ocasión el ministro, frase por la que recibió una avalancha de críticas por su "falta de sensibilidad". De hecho, tras el estallido social, ésta ha circulado en redes sociales como muestra de la distancia de las autoridades con la realidad de las personas.

Por eso, este jueves, en una actividad pública, Fontaine pidió perdón por sus dichos. "Entiendo perfectamente la molestia que causaron mis palabras hace un par de semanas. Humildemente, yo pido perdón. Esas palabras de ninguna manera reflejan lo que quise decir, no reflejan lo que siento, no reflejan lo que creo y lo que ha sido y es un trabajo 100% dedicado a mejorar la vida de los chilenos", sostuvo.

Pero no es la única declaración de una autoridad que ha generado rechazo en los últimos días. Una que también ha sido muy recordada en estos días de protesta es la del ministro de Hacienda, Felipe Larraín, quien frente al último IPC dijo "a los románticos, que ha caído el precio de las flores; así que los que quieran regalar flores en este mes, las flores han caído un 3,7%". Consultado ayer en Canal 13 si hacía un mea culpa por esa afirmación, el ministro señaló que "si a alguien le incomodó, yo lo lamento, la verdad es que la intención fue completamente otra, y lo lamento, pero no nos quedemos en eso".

La Primera Dama, Cecilia Morel, fue otra figura pública que se lamentó por sus palabras, aunque no fueron dadas en una entrevista, sino en una conversación privada en un grupo de Whatsapp. Allí señaló, respecto de las movilizaciones sociales, que "estamos absolutamente sobrepasados; es como una invasión extranjera, alienígena, no sé cómo se dice, y no tenemos las herramientas para combatirlas (...) Aprovechen de racionar las comidas y vamos a tener que disminuir nuestros privilegios y compartir con los demás".

Tras filtrarse el audio, Morel explicó el hecho a través de su cuenta de Twitter, donde señaló: "En un momento en que me sentí sobrepasada por las circunstancias, envié un audio privado que se filtró. Un estado de ánimo personal lo hice parecer como un estado general de Gobierno. Lamento el desacierto".