SANTIAGO.- Casi dos meses después del episodio, la estudiante de Trabajo Social de la Universidad de Chile, Polette Vega –quien fue agredida por una compañera en la sala de clases, en el Campus Juan Gómez Millas– llegó a un acuerdo con su casa de estudios, en una mediación encabezada por la Superintendencia de Educación Superior.
Según informó la entidad fiscalizadora, ambas partes se reunieron hoy en dependencias de la Superintendencia y acordaron una serie de medidas para resguardar la integridad física y psicológica de la estudiante, así como su derecho a la educación.
Según informó la Universidad de Chile, la casa de estudios adoptará una serie de medidas internas que permitan a la alumna ejercer su derecho a la educación en un ambiente de respeto y libre de violencia, las cuales ya había comenzado implementar después de los hechos.
El acuerdo también considera la investigación del hecho y la aplicación de las sanciones correspondientes, por parte de la universidad; la mitigación del daño experimentado por la estudiante y el resguardo de su integridad y la de cualquier otro miembro de la comunidad universitaria, para evitar nuevos casos de agresiones en el campus Juan Gómez Millas.
La casa de estudios también aseguró que Polette Vega contará con todas las facilidades académicas para cerrar el año, con un plan especial de normalización de estudios, y apoyo psicológico y psiquiátrico por parte de profesionales de la universidad, entre otras acciones.
"Podemos decir que esta mediación produjo un acuerdo exitoso y una serie de compromisos por parte de la Universidad de Chile que, como Superintendencia, le haremos seguimiento", señaló el superintendente de Educación Superior, Jorge Avilés, quien agradeció la "disposición de las partes para que este proceso se resolviera de la manera más expedita y satisfactoria".
También resaltó que "los primeros responsables y llamados a mantener un clima de respeto, tolerancia y libre de violencia de todo tipo son las propias instituciones de educación superior y sus comunidades".
La estudiante, por su parte, destacó que "se adoptaron acuerdos que benefician a toda la comunidad universitaria" y sostuvo que "la labor de la Superintendencia fue sumamente relevante". "En algún momento se pensó que no era necesaria una mediación, pero yo considero que, de no haber sido por la Superintendencia, no hubiéramos podido llegar a tan buenas resoluciones", señaló la alumna.
En tanto, desde la Universidad de Chile indicaron que "la mediación viene a sistematizar todas las dimensiones que la universidad ha tomado para proteger y responder a Polette ante las situaciones vividas". Agregaron que "existe un compromiso y plazos explícito para concluir las investigaciones que la universidad inició inmediatamente después del hecho" y que "se ratificaron todos los ofrecimientos y medidas entregadas desde un inicio por la Facultad para que nuestra estudiante pueda concluir sus estudios normalmente".
