SANTIAGO.- Fue cerca de las 03:00 de la madrugada de ayer cuando la Central de Comunicaciones de Carabineros (Cenco) recibió el llamado que implicaría un procedimiento cuestionado desde el Partido Comunista (PC).
De acuerdo a los registros policiales, vecinos del sector del pasaje Perú con calla Vargas, en Calama, alertaban de un intento de robo a la sede de la colectividad en la zona.
Al lugar llegaron policías de Plan Cuadrante, según dijo a 24Horas el mayor Robinson Villarroel, de la Primera Comisaría de Calama, agregando que se constató "que desde la puerta de acceso a este partido político venían saliendo tres personas, mayores de edad, las cuales, al ver la presencia policial, se dan a la fuga del lugar lanzando unos bidones al piso".
Uno de los implicados, añadió Villarroel, fue detenido a unos 30 metros de distancia, mientras que los otros dos a casi 100 metros, escondidos debajo de un auto. Carabineros constató que se trataba de tres adultos, dos de ellos profesores.
De acuerdo a la policía, en los bidones había, en total, cerca de 35 litros de combustible, hallando además en la sede pancartas, mascarillas, antiparras, dos litros de diluyentes, y "otros objetos como sillón y basura, los que podrían ser usados como barricadas".
Por su parte, desde la fiscalía Regional de Antofagasta sostuvieron que procedimiento se inició con el llamado y que, "al concurrir los carabineros, detuvieron estas tres personas, quienes habían salido del lugar portando muebles y bidones cargados de combustibles".
Distinta versión de los hechos contaron desde el Comité Regional de Atacama de PC. A través de un comunicado publicado en Twitter, la colectividad aseguró que los policías, "bajo el argumento de un supuesto llamado por ingreso de extraños", detuvieron desde el interior de la sede al secretario comunal, quien junto a "otros compañeros y cercanos al partido" resguardaban el inmueble debido a amenazas que por parte de "grupos de extrema derecha".
Aseguraron que los ocupantes explicaron a los policías qué hacían en el lugar, pero que estos procedieron "sin mayor motivo en la detención, haciendo ingreso a las dependencias sin ningún tipo de autorización".
Así también, Elizabeth Bruna, de la Dirección Regional del PC, señaló al medio citado que "hay cosas que efectivamente son nuestras, que son los lienzos que hemos usado en las marchas (...) pero el resto, combustibles ha sido plantada por la policía como crimen de Estado".
Por su parte, el presidente del colegio de profesores de El Loa, Ariel Aguirre, también desacreditó la versión de los investigadores: "Nosotros acusamos montajes, porque ellos fueron detenidos dentro del partido político, no en la calle como indica el parte policial. Y por lo tanto acusamos montaje, persecución y criminalización del movimiento, especialmente contra profesores".
El caso llegó ayer hasta el juzgado de Garantía de Calama, donde la fiscalía Regional de Antofagasta imputó a los detenidos el delito de hurto agravado.
Ante la exposición de hechos, el tribunal declaró legal las aprehensiones, y no decretó medidas cautelares. "Se han dispuesto diversas diligencias para esclarecer los hechos, con el objeto de determinar el delito y ver si existió o no la participación penal de los imputados", señaló el vocero de la fiscalía regional, José Troncoso