WASHINGTON.- La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó el "uso excesivo de la fuerza en el contexto de las protestas sociales en Chile", los "graves desmanes en el curso de algunas manifestaciones", y expresó su "grave preocupación por el elevado número de denuncias de violaciones a los derechos humanos" desde el inicio de las manifestaciones, así como por "las características de dichas vulneraciones, que apuntarían hacia la existencia de conductas repetitivas de violencia en contra de manifestantes".
Así lo señala ese organismo en una declaración, donde detalla que tras recibir diversa información sobre "hechos de violencia sexual, tortura y tratos crueles, inhumanos y degradantes en el contexto de las detenciones", decidió instalar una "Sala de Situación de Coordinación y Respuesta Oportuna e Integrada" (SACROI) para monitorear la situación de derechos humanos en Chile.
Luego hace un repaso de las distintas situaciones ocurridas en el país desde el 18 de octubre, citando variadas fuentes oficiales, de organismos autónomos y de Gobierno. Así, alude a las declaraciones del Presidente de la República, quien el 17 de noviembre "señaló que, en el contexto de las protestas sociales, se vulneraron derechos humanos y hubo un uso excesivo de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad del Estado en algunos casos".
También menciona los datos sobre número de fallecidos, heridos y las investigaciones que lleva la Fiscalía por 2.670 casos de presuntas violaciones a los derechos humanos –con niños y adolescentes entre las víctimas–, incluyendo casos de tortura, violación o abuso sexual por agentes del Estado. Alude a informes del INDH y la Defensoría de la Niñez, que describen "disparos de perdigones en dirección al cuerpo, cuello y rostro de los manifestantes, falta de gradualidad en el uso de la fuerza, utilización de sustancias lacrimógenas en presencia de personas adultas mayores, embarazadas, y personas heridas de gravedad por gas pimienta, perdigones, granadas de gases y carabinas lanza gases".
Otra situación que menciona es el "uso desproporcionado de la fuerza, sin distinguir entre quienes participaban de las manifestaciones y quienes no" y las lesiones a "observadores de derechos humanos" y "personal que ejercía labores de auxilio y asistencia médica que portaban su vestimenta distintiva".
"Alarma" por algunas prácticas a detenidos
El organismo expresa su gran inquietud por estos hechos, reconociendo una "extrema preocupación por el elevado número de personas que han sufrido traumas oculares como consecuencia del impacto de perdigones o bombas lacrimógenas utilizados por Carabineros", y lamenta la situación del estudiante Gustavo Gatica, quien tuvo la pérdida total de visión en los dos ojos.
También manifiesta "grave preocupación por la información recibida que señala torturas y tratos crueles, inhumanos y degradantes en el contexto de las detenciones" y su "alarma" por la información publicada respecto de "prácticas por parte de Carabineros a detenidos en las que se harían simulacros de ejecuciones, grave maltrato físico y verbal, golpizas, hacinamiento en lugares sin ventilación y vejaciones injustas a niños, niñas y adolescentes".
Otro punto en que enfatizan es "el elevado número de denuncias de abuso sexual en el contexto de las detenciones", incluyendo "violaciones a personas detenidas, desnudamientos forzados, sentadillas, amenazas de violación y otras formas de maltrato sexual". Apunta que la SACROI recibió información de que "en algunos casos se habría golpeado reiteradamente en la zona genital con un bastón de servicio de Carabineros a niños, niñas y adolescentes, además de ser obligados a desnudarse en la comisaría".
Llama a "diálogo efectivo e inclusivo" y valora esfuerzos por nueva Constitución
Ante esto, la CIDH insta a las autoridades nacionales a "investigar con debida diligencia los referidos hechos de violencia, identificar y sancionar a los responsables e informar los resultados debidamente a la ciudadanía", y "saluda el compromiso anunciado por el Presidente de la República para que estos casos sean debidamente investigados, juzgados y sancionados, así como asistir a las víctimas en su recuperación".
También llama a que "ordenen el cese inmediato del uso desproporcionado de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad del Estado" y recuerda que "la actuación de Carabineros de Chile (...) debe estar en estricto apego a los estándares internacionales". En esa línea, pide dar "urgencia" a la discusión del proyecto de ley que moderniza la gestión institucional en las Fuerzas del Orden y Seguridad, y pide incorporar la reforma a Carabineros.
Sugiere además que la Fiscalía Nacional cuente con un "refuerzo especial" para la investigación de los hechos, para que "se puedan determinar con celeridad las denuncias de violación a los derechos humanos"; y subraya la importancia de fortalecer los órganos autónomos como el INDH y la Defensoría de la Niñez.
Respecto de la iniciativa presidencial para que las Fuerzas Armadas controlen la infraestructura pública, la CIDH señala que "el mantenimiento del orden público y la seguridad ciudadana deben estar primordialmente reservados a los cuerpos policiales civiles" y que "cuando se tiene la participación de las fuerzas armadas en tareas de seguridad, ésta debe de ser extraordinaria, subordinada y complementaria, regulada y fiscalizada".
La CIDH también reprueba que "en determinadas circunstancias, grupos de manifestantes hayan provocado graves desmanes durante algunas manifestaciones", señalando que "condena enérgicamente todo acto de violencia" y recuerda que "la protesta social es legítima en tanto se desarrolla en forma pacífica". En ese sentido, llama al Estado a "investigar, de forma imparcial, exhaustiva y expedita, tanto las violaciones de derechos humanos como los delitos que se hayan cometido en dichos contextos, así como juzgar y sancionar los responsables".
Finalmente, el organismo urge a la sociedad chilena a "entablar un dialogo efectivo e inclusivo para abordar las demandas legítimas de la población, con el máximo respeto a los Derechos Humanos y en el marco democrático del Estado de Derecho" y "saluda a los esfuerzos de convocarse a una nueva Constitución".
