En prisión preventiva seguirá el ciudadano estadounidense, John Cobin, formalizado en noviembre del año pasado por disparar en medio de manifestación en el balneario de Reñaca, Viña del Mar, dejando a una persona herida.
En dicha oportunidad, la fiscalía de Valparaíso le imputó el delito de homicidio frustrado, infracción a la Ley de Armas y disparos injustificados, y el Juzgado de Garantía de Viña del Mar ordenó su reclusión, medida que hoy confirmó nuevamente.
Y es que la defensa del imputado había solicitado revocar la cautelar y dictar, en su reemplazo, arresto domiciliario total y arraigo, argumentando que "mi representado jamás tuvo la intención de matar a nadie" y que actuó en defensa propia.
Esto, ya que la tarde del domingo 10 de noviembre un grupo de personas se encontraba en la avenida Borgoño realizado la práctica conocida como "el que baila pasa", que implica bloquear el tránsito de los vehículos y obligar los conductores a descender y danzar en la calle para continuar adelante.
De acuerdo a la defensa de Cobin, este declaró no haber actuado con intención homicida y que tenía alto conocimiento en cuanto al uso de armas. Añadió que pudo haber disparado en más oportunidades y no lo hizo.
Ante estos argumentos, la fiscal Paola Rojas le recalcó al abogado que "ser un fanático en las armas no lo convierte en experto en su uso".
Finalmente el magistrado Rodolfo Moreno desestimó la petición de cambiar la medida cautelar "no habiendo nuevos antecedentes que hagan modificar lo antes resuelto, que dice relación con dos homicidios frustrados, infracción a la Ley de Armas, disparos en la Ley de Armas, delitos que si se llegan a acreditar en la audiencia de juicio tienen penas bastante altas".
El juez amplió el plazo de investigación en 50 días.
