La Seremi de Salud Metropolitana aplicó hoy una multa de
1.000 UTM ($50.327.000) contra Juan Salazar, el único imputado de haber organizado una
fiesta en
Maipú la madrugada del 3 de mayo, en la que participaron cerca de 400 personas, violando así las medidas que rigen en el país producto de la pandemia.
La decisión se toma precisamente por la serie de incumplimientos sanitarios detectados en el evento, entre los que se cuenta el toque de queda, la prohibición de reuniones con más de 50 personas y la obligación de asegurar el distanciamiento social.
No obstante, desde la Seremi informaron además que el galpón donde se llevó a cabo la fiesta, en Camino a Melipilla, infringió otras disposiciones. Por ejemplo, el recinto contaba con malas condiciones higiénicas en los baños, escombros y residuos en el piso y un muro perimetral en mal estado.
Asimismo, se descubrió la presencia de roedores muertos en el terreno y que el galpón no posee vías de evacuación señalizadas ni luces de emergencia, como lo establece la normativa.
Así, la autoridad regional de salud puso fin al sumario sanitario abierto hace ya casi dos semanas, poco después de que se clausurara el recinto y tras la detención del único acusado de organizar la fiesta.
En cuanto a la investigación penal, este miércoles la Corte de Apelaciones de Santiago revocó la medida cautelar de prisión preventiva contra Salazar, decretándose su arresto domiciliario total.
Esta es la segunda vez que se modifica la cautelar, ya que en un principio el imputado había quedado con arresto domiciliario nocturno. No obstante, aquella ocasión fue sorprendido incumpliendo la medida, por lo que se dictó su prisión preventiva, la que fue rebajada esta jornada.
