Los presidentes de los partidos que conforman Convergencia Progresista reafirmaron su respaldo hacia el proyecto que permitiría el retiro del 10% de los fondos de las AFP para paliar la crisis provocada por la pandemia del coronavirus, y manifestaron su visión crítica hacia el nuevo paquete de ayuda presentado por el Gobierno.
A través de una declaración pública, el presidente del PS, Álvaro Elizalde, junto a su par del PPD, Heraldo Muñoz, y el líder del PR, Carlos Maldonado, señalaron que "la situación del país es grave y el Gobierno ha llegado mal y tarde, con soluciones parciales e insuficientes, frente el drama social que viven las familias chilenas".
"El nuevo Plan Clase Media anunciado por el Presidente Sebastián Piñera no cubre las necesidades de las familias,
constituye más bien una respuesta comunicacional ante la demanda de la inmensa mayoría de la ciudadanía para aprobar la reforma que autoriza el retiro de hasta el 10% de los fondos de pensiones", añadieron.
Asimismo, subrayaron que "hay una distancia considerable entre los anuncios del Gobierno y la realidad de su implementación. Así se ha visto tanto en el IFE 1.0 como en el IFE 2.0. Existe un criterio engañoso e hiperfocalizado de estos instrumentos, que obstaculiza su acceso y restringe su cobertura".
"La gente duda que califique y piensa que siempre la ayuda le llegará a otros. Lejos estamos aún de que el beneficio sea automático, justo y oportuno, como es necesario", dijeron, junto con destacar que el proyecto que autoriza el retiro del 10% del fondo de cotización obligatoria "se ha convertido en el último recurso de emergencia".
En ese contexto, los líderes de esas colectividades hicieron un llamado "a todos los parlamentarios de las fuerzas políticas representadas en el Congreso Nacional a promover y apoyar la reforma que autoriza el retiro del 10%. La política debe responder a las y los ciudadanos".
"Se trata de un proyecto popular, pero no populista, como ha pretendido caricaturizar insistentemente el Gobierno (…) y representa una respuesta necesaria ante el drama de las familias chilenas, el que se ha visto agravado por un Gobierno mezquino e indolente. Velaremos porque el proyecto no sea regresivo para los afiliados y mantenga un criterio de progresividad”, concluye la nota.
