Querellas cruzadas se presentaron en las últimas horas a raíz de la agresión que llevó al abogado Hernán Calderón Salinas hasta un centro médico a mediados de la semana pasada.
El hombre (67) acusó a su hijo, Hernán Calderón Argandoña (23), quien mantiene una orden de aprehensión vigente, por el delito de parricidio frustrado, mientras que la pareja del joven de iniciales R.N.H. (23), recurrió a la justicia asegurando haber sido víctima de reiterados abusos sexuales por parte del profesional.
Según los escritos, habrían sido las denuncias de parte de la mujer las que gatillaron la presunta agresión por parte de Calderón Argandoña. Así se también, se reveló de otro supuesto episodio de violencia intrafamiliar entre padre e hijo.
Fue el pasado 11 de agosto cuando Calderón Salinas denunció a su hijo ante Carabineros por una agresión con arma blanca al interior de su departamento en la comuna de Las Condes. Se dispuso la captura del joven, además del ingreso a su inmueble, donde se encontraron armas -las cuales estarían inscritas-, además de municiones y cerca de dos gramos de marihuana.
Calderón Salinas fue llevado hasta la Clínica Alemana, donde se constataron diversos cortes en los brazos, destacando una herida "con gran compromiso de tejido profundo".
La querella de Calderón
La querella de Calderón Salinas relata lo que habría ocurrido la tarde del 11 de agosto. De acuerdo al escrito, Calderón Argandoña llegó a eso de las 16:00 llegó a su departamento ubicado en calle San Olav.
El joven habría "engañado" a la asesora del hogar, indicándole que necesitaba ingresar al inmueble en el que vivió hasta el 5 de junio para retirar algunas pertinencias. Ante la negativa de la mujer, Calderón Argandoña entró a la fuerza, para luego golpear con puños y pies al abogado. Ello, en presencia además de la pareja de Calderón Salinas, a quien el joven habría empujado "botándola al piso, golpeándose ella, la cabeza en una mesa de arrimo".
"Él primero se mira a un espejo, luego posa mostrando las manchas de mi sangre sobre su ropa, procede a tomar una fotografía de si mismo con su trofeo, mi sangre en sus brazos, y luego parece enviar la fotografía a alguien, como si reportara su labor".
Querella de Hernán Calderón contra su hijo
Luego, continúa la querella, Calderón Argandoña sacó un cuchillo con hoja curva: "En ese momento, mi hijo, empuñando el cuchillo que había traído previamente y que guardaba en su pantalón, me ataca de frente, intentando apuñalarme en el estómago, fallando sólo por mi reacción, dándome el ataque en mi antebrazo izquierdo mientras me gritaba 'ahora si que te voy a matar maldito'".
Ya estando el abogado en el suelo, Calderón Argandoña "procede a inmovilizar mi mano derecha con su mano izquierda, y con su mano derecha, en la que continuaba sosteniendo el cuchillo, procede a apuñalar múltiples veces mi mano derecha (...) De esa forma, siguió intentando desgarrar la mayor cantidad de tejido posible de mi mano, con el fin asumo dado el movimiento y su acción de amputarla".
La pareja de Calderón Salinas llamó al conserje, quien avisó a Carabineros de la situación. En tanto, dos maestros que trabajaban en el departamento del frente llegaron al inmueble de Calderón Salinas, situación que habría gatillado la huida de su hijo.
A los días, agregó el abogado, revisó las cámaras de seguridad, constatando que el joven se fotografío tras el hecho: "Él primero se mira a un espejo, luego posa mostrando las manchas de mi sangre sobre su ropa, procede a tomar una fotografía de si mismo con su trofeo, mi sangre en sus brazos, y luego parece enviar la fotografía a alguien, como si reportara su labor".
Calderón Salinas aseguró además haber sido víctima de otro episodio, ocurrido en junio de este año, cuando aún vivía con su hijo. Sostuvo que el 5 de ese mes, el joven lo increpó mientras se tomaba un baño "en evidente estado de descontrol", acusado al abogado de insinuarse a su pareja.
El joven habría sacado una pistola, apuntándolo en el pecho y amenazándolo. Finalmente disparó hacia el espejo del velador del dormitorio. "Conozco a mi hijo, lo he visto en diversas facetas de su vida, jamás pensé que pudiera hacer algo como lo que he narrado. De estos hechos no quise hacer denuncia por no perjudicar a mi hijo y su carrera, hoy me doy cuenta que debí accionar inmediatamente", cerró el abogado.
Este no es el primer conflicto judicial contra Calderón Argandoña. En junio la Concesionaria Costanera Norte se querelló contra del joven por las carreras clandestinas convocadas en marzo por el club de autos que este dirige. Se invocó la ley de Seguridad del Estado.
La querella por abuso sexual
Por su parte, R.N.H., pareja de Calderón Argandoña, se querelló contra el abogado por el delito reiterado de abuso sexual, ocurrido mientras los tres vivían en el mismo departamento.
Aseguró que las insinuaciones del abogado comenzaron en febrero de 2020, luego que el abogado la llamara constantemente para consultarle sobre su relación con Calderón Argandoña, además de su ubicación, argumentando que "vivía en su departamento" y "le debía explicaciones".
"Comencé a percibir una actitud extraña (...) , él se me acercaba bastante y yo sentía que me miraba de una manera distinta, me hacía insinuaciones".
Querella contra Calderón Salinas.
En marzo, continuó, "comencé a percibir una actitud extraña (...) , él se me acercaba bastante y yo sentía que me miraba de una manera distinta, me hacía insinuaciones".
La situación se agravó cuando Calderón Salinas la tocó en sus glúteos y pechos sin su consentimiento, de acuerdo la querella.
La joven relató además un episodio de abril de este año, en el que Calderón Salinas le habría solicitado, ante su hijo y pareja, probarse un bikini para "ver qué tan pequeño era". Tanto Calderón Argandoña como la pareja del abogado le habrían indicado a este que era un comentario "inapropiado". "Me atrevería a señalar que este fue el momento en que Hernán Calderón Argandoña comenzó a percatarse del comportamiento lascivo de su padre hacia mí", dice el documento.
R.N. habría aprovechado una discusión con su pareja a principios de junio para abandonar el departamento "ya que no encontraba otra manera de salir de la situación que estaba viviendo". En esa instancia, "Calderón Salinas me dice que no quiere que me vaya, a lo que le respondo que me voy a ir del departamento. Luego, el querellado me señala 'Yo quería que tú fueras mía, ¿no te atreves?'".
A los días, le contó a su pareja lo que habría ocurrido con el abogado, lo que implicó que Calderón Argandoña increpara ese mismo día a su padre.
Tras ello, la pareja se fue a vivir al departamento del joven. Ya el 11 de agosto, día de la agresión con un arma blanca, Calderón Argandoña revisó el teléfono de R. N, leyendo una conversación de Whatsapp que la joven tenía con el abogado. "Él me entrega mi celular, me dice que nos vemos en un rato y se retira del departamento", acotó.
